En horas de la mañana, retomaron las obras en cercanías al puente que cruza el Río Carcarañá y la calzada quedó reducida a una sola mano. Inmediatamente el tránsito se congestionó por la densidad de circulación. Mientras tanto, las autoridades encargadas de ordenar, no lograban coordinar los esfuerzos para garantizar el paso. Finalmente, llegó la paz.
Gendarmería, Policía Vial y la Guardia Urbana de Timbúes, evalúan cómo realizarán el operativo para organizar y garantizar el paso del transporte público de cara a los días de trabajo que restan, tal como fue prometido a los vecinos de Villa La Ribera en los últimos días.
En diálogo con IRE, el presidente comunal de Timbúes, Amaro Gonzalez, sintetizó: “Tratamos de coordinar con Gendarmería que es la fuerza que está un poco tozuda, para que deje el manejo a la Guardia Urbana que tiene una experiencia importante en la región y pueda permitir que no se interrumpa el transporte público, que es lo que preocupa”.
Autoridades de Pueblo Andino y Oliveros, también fueron convocadas para buscar una solución en conjunto. “Le pido a los vecinos que tengan paciencia, estamos trabajando en el tema, por eso llegamos hasta acá, respetando la palabra y el compromiso que tomamos”, indicó González.
De cara al lunes y martes de la próxima semana, se acordó con la empresa que realiza las obras, que los trabajadores realicen las tareas en el turno noche para que genere menos dificultades a los vecinos. “Cortes hay que hacer si o si en una mano para llevar a cabo las tareas de reparación que tiene la empresa a pedido de Vialidad Nacional”, sostuvo el presidente timbuense.
Cabe destacar que la jurisdicción pertenece a Gendarmería al tratarse de una ruta nacional, en ese sentido el presidente comunal destacó: “Estamos haciendo las gestiones para que entre nuestra gente, los gendarmes a cargo y la policía vial coordine el trabajo”. Finalmente lograron destrabar la situación y cumplir con la promesa de que la Guardia Urbana coordine el tránsito.