En marzo de 2017 un camión que circulaba por Ruta 91 embistió a una traffic en Villa La Ribera y dejó como saldo el fallecimiento de dos menores, Milton de 9 años y Lautaron de 7. El fatídico accidente enlutó a toda la comunidad y motivó una incansable lucha que continúa hasta el día de hoy. Más allá del incesante pedido de justicia, la familia reclama que el transportista está libre y pese a estar inhabilitado, continúa conduciendo.
Así lo dio a conocer Melisa Machuca, madre de Milton Ferreyra. Que en los últimos días decidió visitar la ciudad de Oliva, provincia de Córdoba, donde vive Hugo Alberto Racca, el camionero condenado. Allí, la mujer pretendía colocar folletos para alertar a la comunidad de esa localidad para que, en caso de ver al hombre conducir, diera aviso a la policía, ya que está inhabilitado para tal actividad.
Sin embargo, en Oliva se encontró con una indignante situación. Racca se encontraba conduciendo una motocicleta. “Cómo es posible que, a casi un año de iniciar su condena, éste tipo siga manejando y que ni la policía de Oliva sepa que no puede manejar más. Es una vergüenza”, lamentó en diálogo con IRE.
Aquella fatídica noche de marzo de 2017, la traffic regresaba desde Puerto Gaboto y se dirigía a Rosario. En Ruta 91 frenaron detrás de un camión que no avanzaba por congestiones en el tránsito y de pronto, otro camión llegó a alta velocidad y los terminó chocando.
En consecuencia, el conductor del camión, Hugo Alberto Racca, fue condenado por el delito de homicidio culposo, agravado por ser dos las víctimas fatales y condenado a tres años de prisión preventiva condicional, más la inhabilitación para conducir vehículos con motor.
El descargo de Melisa:
“Fui a descansar unos días a Córdoba y cuando volvía a Rosario decidí pasar por Oliva, lugar donde vive este asesino, para dejarle unos folletos para que no se olvide que mató a mi hijo, pero la sorprendida fui yo”, dijo.
Y continuó: “Me encontré a esta basura manejando una moto, cuando en la condena que le dieron lo inhabilitaron para manejar. La misma policía lo ve manejando siempre y ni siquiera saben que no puede manejar ni la condena que le dieron”.
“Jueces, fiscales y quienes deben hacer cumplir la ley son una mi****. Pero si aplicamos justicia por mano propia, terminamos presos. ¿Hasta cuándo la justicia se va a burlar del dolor ajeno?”, finalizó.