Una verdadera historia de amor. Malani llegó de Chaco junto a su mamá cuando apenas tenía meses, y se aferraron tanto a la vida que no hubo batalla que no pudieran ganar. Pese a que la patología de la niña de diez años deteriora con el paso del tiempo, nada las detiene. Ahora, están a punto de conseguir su casa propia adaptada a sus necesidades sanitarias, construída por la comuna de Timbúes. 

Melani padece esquizoencefalia, una enfermedad pulmonar crónica, tiene realizada una traqueotomia y una gastronomía. Tiene las caderas luxadas y osteoporosis, lo que le genera fracturas espontáneas. Es dependiente del uso de oxígeno y respirador monal. Y para alimentarse utiliza un sistema de bomba. En consecuencia, debe tener un contínuo cuidado de profesionales y una casa dispuesta a brindarle comodidades para realizar sus tratamientos.

IRÉ descubrió la historia a través de Silvia, su mamá. Agradecida y con una fuerza sin igual compartió su sueño cumplido: luego de pasar por muchas casas alquilando, adaptandose a las incomodidades, logrará establecerse y darle calidad de vida a su única hija. El objetivo se cumplió a partir de un pedido especial que radicaron a la gestión de Amaro Gonzalez, quien adjudicó la vivienda de manera directa contemplando la situación.

Luego de la tramitación, hubo varias reuniones para conocer las necesidades y de a poco fueron adquiriendo los materiales que son especiales de acuerdo a las dimensiones con el equipamiento. Con todos los elementos necesarios, estiman que en quince dias más de trabajo albañil, la familia de a dos tendrá su casa nueva, con comodidades para el tratamiento de la pequeña. 

Pilar Pacheco, es parte del grupo de profesionales que trabaja interdisciplinariamente con Melani, es profesora de educación especial y le brinda su apoyo pedagógico desde 2011. En diálogo con IRÉ contó los detalles de la historia: “La comuna de Timbúes acompaña pagando parte del alquiler, pero las casas en las que estuvieron no tuvieron las condiciones para Mela. Ahora esta viviendo en una prefabricada, que tampoco tiene las instalaciones necesarias”. Con la gravedad que conviven con una invación de hormigas, que no pueden ser tratadas con ningún producto por la patología de la niña. 

Pacheco explicó además un nuevo aspecto positivo: “La construcción que realiza la comuna está a una o dos cuadras del SAMCo local. Con Melani tenemos muchas urgencias con el problema respiratorio”. Contará además con rampas para la ambulancia y con una construcción apta para el ingreso rápido. 

“Todas las articulaciones desde lo público y lo privado, en el caso de Melani funcionan muy bien”, reconoció la profesional. Pero, avanzó que no es casual y confió: “Silvia, es una madre 24 horas, más allá del tiempo que está afuera por trabajo. Es madre soltera, no recibe cuota alimentaria, pero no se detiene, es una madre muy luchadora. Consiguió muchas cosas gracias a esforzarse de esa manera. Es realmente admirable como madre”.