“Ayer no ví ningún reclamo, fue una horda descontrolada y desquiciada desde el punto de vista anímico”, indicó Alfredo Olivera, Secretario de Seguridad Ciudadana de la Comuna de Timbúes en diálogo con IRE sobre los hechos acontecidos en la tarde de ayer. “Fui recibido junto al Presidente Comunal por insultos, descalificaciones, gritos, violencia extrema, a tal punto que personalmente, no pude decir nada”.
“Había alrededor de 150 personas que no estaban reclamando, sino, expresándose violentamente hacia la gestión de seguridad de la policía y, por supuesto, hacia mí y nuestro intendente”, dijo Olivera y añadió: “Fui objeto, propiamente, de un linchamiento, recibí violencia de género porque fui agredido por dos mujeres, que para colmo, son empleadas municipales. Me golpearon en la nuca por lo que tengo una importante conmoción cerebral, fui agredido también por hombres que no se destacan por sus valores en combate porque no lo hicieron de frente si no, por la espalada”, señaló sobre los hechos violentos que se produjeron hacia su persona en la jornada de ayer.
Ante este panorama, confirmó que había realizado una denuncia formal contra las personas que lo agredieron. “Hemos detectado a los responsables que han sido denunciados penalmente por amenazas calificadas y agresiones físicas; pero además -continuó Olivera- había cierto grado de organización para instigar a la violencia irreflexiva y llevaremos adelante la investigación correspondiente”.
Ante esto, sostuvo que la persona que diga otra cosa, sobre lo sucedido ayer, estaba mintiendo. Y en este sentido, apuntó contra los medios de comunicación presentes. “Hubo mala fe de los que informan también. Relatan, cuentan, denuncia lo que les conviene”, denunció.
Dejando a un lado lo sucedido, el funcionario comunal reconoció que la situación de inseguridad existe y es real. Y sobre esto, señaló: “Acudíamos al encuentro en respuesta al sentimiento de la gente de formar una reunión de la que esperábamos que saliera algo productivo, pero no pasó. Sin embargo, hay mucho que hacer y no puedo quedarme en el dolor de haber sido agredido violentamente”, determinó.
“Todos saben la manera en la que trabajo y me opongo a los hechos delictivos. Soy el funcionario público comunal, que más trabaja para combatir el delito; no soy el enemigo de la gente ni el responsable por la inseguridad, por lo tanto, no voy a admitir que desmientan mi vocación constante y permanente en favor de la seguridad. Me duele que se quiera instalar la mentira que dice que Timbúes es una zona liberada”, determinó con un tono de indignación Olivera.
“Aunque la responsabilidad originaria de la seguridad no es de este área sino de la policía provincial, la Secretaría de Seguridad Ciudadana y la Guardia Urbana ofrecen una gestión permanente y colaboramos constantemente con la policía. Llevamos una lucha permanentemente desde este Gobierno Comunal para combatir la inseguridad”.
Por último, ante la pregunta si después de lo sucedido, prevén un encuentro con la gente para dialogar y tratar el tema de inseguridad, el funcionario indicó: “Hay espacio para la conversación con las personas que no son violentas que, por supuesto, es la gran mayoría; la gente esta preocupada y tiene que hablar, expresarse. Por supuesto que vamos a dialogar y vamos a estar al lado de la gente. Si hay que reclamar por falta de personal policial, de móviles, está bien hacerlo. Es legítimo que la gente reclame y se exprese, pero con descalificación, agresiones y violencia no, de ninguna manera”, culminó Olivera en diálogo con este medio.