Un relato de extrema violencia. Anoche, la guardia urbana le pidió la documentación a un joven que circulaba en moto, al no tenerla, se la remitieron al corralón. Poco después, junto a su familia, increparon a un policía retirado, jefe del área de control urbano, le pegaron y lo apuñalaron. Permanece internado con una importante herida en uno de sus brazos. 

El inicio del suceso se dio cuando personal de la Guardia Urbana de Timbúes alrededor de las 23 horas, frenó a una moto conducida por un vecino del pueblo, al no tener la documentación, se la remitieron al corralón. 

Poco después una de las patrullas fue interceptada por un Duna. Del vehículo se bajaron tres personas: El muchacho que había tenido el entredicho minutos antes, su madre y su abuela. Una de las señoras, avanzó sobre el jefe del área de policías que tiene la secretaría de Seguridad Ciudadana y le propinó un golpe arriba del ojo. 

Inmediatamente no dudó y convocó al joven: “matalo, matalo, matalo”. El hombre apuñaló al policia retirado, dándole entre la zona del hombro y el codo. Acto seguido, intentó herir a otro trabajador del área tirandole tres puntazos. Y se dieron a la fuga. 

Los efectivos, rápidamente convocaron al área de salud y atendieron al hombre de 60 años con una herida de unos 16 centímetros de largo por 6 de profundidad. Luego fue derivado para una mayor atención al sanatorio Britanico de Rosario, donde permanece internado. 

Alrededor de las 9 de la mañana de hoy, la fiscal Melisa Serena le determinó lesiones graves dolosas. Por su parte, indignados por lo sucedido y alarmados por la violencia con la que actuaron en la localidad, la comuna prevé presentarse en la causa como querellante.  

Imagen ilustrativa.