Comerciantes proveedores de la Comuna de Timbúes se reunieron este martes por la noche en la plaza para visibilizar el reclamo por pagos atrasados desde el mes de octubre. Hablan de cifras millonarias en todo tipo de rubros. “Queremos cobrar por nuestro trabajo”, afirman.
Los vecinos afectados reclaman que, sin razón alguna, los pagos se suspendieron desde hace dos meses. “Todos vivimos de nuestro trabajo y si no cobramos no podemos pagar. Es así de simple, no tiene otro tinte”, indicó una de las damnificadas en diálogo con IRE.
Y continuó: “Es simplemente defender nuestro trabajo y cobrar lo que nos corresponde. Esta comuna no es pobre, tiene un ingreso diario del peaje de camiones, no nos pueden decir que no hay para pagarnos”.
A la falta de respuesta se suma que no les recibieron las facturaciones de noviembre. “Dicen que están en pausa y que no pueden recibir nuestras facturaciones. Es ilógico, nadie está en pausa. Hasta el 10 de diciembre son gobierno y deben darnos respuestas”, reclamó.
Y resaltó: “Cuando uno asume un compromiso lo debe terminar y debe terminar con sus obligaciones por sobre todas las cosas. Viendo que está no es una comuna pobre donde no hay recursos, antes del 10 de diciembre todos los pagos tienen que estar realizados”.
Por otra parte, la vecina indicó que no es la primera vez que se atrasan los pagos y denunció: “Cuando uno ha podido hablar o expresar opiniones, los pagos casualmente se demoran a 60, 90 o 120 días. Si uno se calla y no participa de nada, puede que con suerte a los 30 días cobre. Se manejan tipo castigo”.
En ese mismo sentido, abundó: “Era un pueblo sumamente oprimido, no podía expresarse libremente y eso es bastante feo para este siglo y para este momento. Es la ansiada libertad de expresión que estábamos necesitando y la que hoy estamos festejando”.
“No es época de este tipo de autoritarismo y patoterismo, esto se tenía que terminar y evidentemente la gente eligió. Algunos comerciantes siguen arriesgando su capital y otros han decidido no aceptar más porque es una situación que no se puede bancar más”, añadió.
Por otra parte, indicó que dialogaron con el presidente comunal electo, Anotnio Fiorenza, quien se comprometió a ver la situación de los comerciantes al asumir. Sin embargo, reclaman que las boletas tienen que estar ingresadas para que esa deuda pase de una gestión a otra.
“Si no podemos presentar las boletas, entonces no está pasando un balance real. Está pasando parte de un trabajo incompleto, entonces va a figurar una cosa, pero en realidad hay muchas otras deudas de gente que todavía no se hace presente por miedo”, afirmó.
Por ello también piden a todos los proveedores afectados que se sumen al reclamo. “Los grandes comerciantes pueden seguir subsistiendo, pero hay comerciantes chicos que dependen de ese dinero para poder pagar un alquiler, para renovar mercadería y eso no está. Es una vergüenza lo que está haciendo el gobierno”, lamentó otro damnificado.
Y continuó: “Al hacer lo que está haciendo, mostró la hilacha. Está fundiendo a los comerciantes que confiaron en ellos. No te permiten presentar la facturación para poder cobrar y queda como que esa deuda la comuna no la tiene”
“No se trata de tener la camiseta de Fito o la de Fiorenza. Simplemente es ver cómo podemos vivir todo el pueblo, cómo podemos estar bien y darnos una mano entre todos. Quiero que todos los comerciantes tengamos la posibilidad de poder subsistir. Es simplemente querer cobrar por nuestro trabajo”, finalizó.