El mundo digital fue sacudido una vez más por la interrupción del servicio de Instagram y Facebook, dos de las redes sociales más populares a nivel mundial.
Millones de usuarios se encontraron repentinamente desconectados de estas plataformas, lo que generó inconvenientes tanto a nivel personal como profesional. Esta última caída se suma a una serie de incidentes similares que tuvieron lugar durante el último año.
Hace apenas un mes, Instagram experimentó una interrupción a nivel global, privando a los usuarios de la capacidad para compartir momentos, interactuar con amigos y acceder al contenido de la plataforma. Esta problemática afecta no solo a los individuos, sino también a negocios y organizaciones que utilizan estas redes para promocionarse, comunicarse con su audiencia y generar ingresos.
En el transcurso del pasado año, estos episodios de caídas recurrentes se convirtieron en un motivo de creciente inquietud para los usuarios de Instagram y Facebook. La incertidumbre sobre la confiabilidad y estabilidad de estas plataformas llevo a muchos a considerar otras alternativas, o buscar medios adicionales para mantenerse conectados.