Durante la final entre Argentina y Colombia en el Hard Rock Stadium de Miami, la expectativa por el show de Shakira aumentaba a medida que se acercaba el entretiempo. Sin embargo, debido a los problemas de organización y los retrasos en los ingresos al estadio, el partido y el show de la artista se demoraron, generando críticas hacia la Conmebol. A pesar de esto, Shakira logró cautivar al público con su performance, interpretando tres temas y manteniéndose en escena más tiempo del previsto.
Con una remuneración estimada en 2 millones de dólares por tan solo 5 minutos de presentación, Shakira ofreció un espectáculo al estilo Las Vegas, con la colaboración del famoso locutor Michael Buffer. La presencia de la cantante trajo consigo recuerdos de su participación en el Mundial de Brasil 2014, donde cantó en la final entre Argentina y Alemania, la cual no tuvo un final feliz para el equipo nacional.
A pesar de las expectativas iniciales de que el show no superara los 15 minutos, la duración final del espectáculo de Shakira se extendió a 26 minutos, aumentando la lista de fallas en la organización de la Conmebol. Aunque la artista logró entretener al público con su música, los incidentes en los accesos al estadio empañaron el evento, generando críticas y cuestionamientos sobre la gestión del torneo continental.