Silvana Gómez es una mamá que hace tres semanas está internada en el Sanatorio de la Mujer en Rosario con Morriset, su pequeña beba de seis meses que padece síndrome de West, una enfermedad de epilepsia refractaria. Luego de que los médicos evaluaran el cuadro epiléptico dosificando varios medicamentos, la droga que controlaría las crisis epilépticas que sufre la bebé sería la contenida en las ampollas de ACTH fabircada laboratorios Elea, que dejó de producirla.
En diálogo con IRÉ Sivana pidió ayuda a la comunidad: “Apelamos a la solidaridad de toda la comunidad regional y provincial para recaudar 20 ampollas de la droga ACTH de laboratorios Elea que queden disponibles en el mercado, en algún hogar, en alguna farmacia donde aún permanezcan remanentes no vencidos de esta única droga que controlaría las crisis epilépticas de Morriset que cada vez son más severas”.
El Síndrome de West, es una alteración cerebral epiléptica de la infancia, grave y poco frecuente. Se caracteriza por espasmos epilépticos y retraso del desarrollo psicomotor, entre otros factores. Los niños suelen manifestar la enfermedad entre los 3 y 6 meses de edad. Las convulsiones son contracciones bruscas de la musculatura del cuello, tronco y extremidades, que se suelen acompañar de pérdida de conciencia. Pueden ser espasmos con cabeceo o encogimiento de hombros, en extensión, o mixtos. Pueden aparecer diferentes tipos de espasmo en el mismo paciente o durante una crisis.