Serodino se convirtió nuevamente en una postal de solidaridad en la mañana de este miércoles, cuando una treintena de vecinos se acercó al Centro Integral de Desarrollo Comunitario (CIDeC) en el marco de la primera campaña de donación de sangre que se trasladó a la localidad para ayudar a Mauro, un adolescente con síndrome de down que enfrenta un trastorno en la médula y necesita de transfusiones con frecuencia.
Luego del nexo que generó IRE entre la administración comunal y el Hospital Italiano Sur, el banco de sangre anunció que llegaría al pueblo para llevar adelante una jornada de donación. Para ello, se necesitaba de la predisposición de al menos 30 dadores, que en menos de un día, ya habían cubierto el cupo solicitado.
“Estamos muy contentos por la repercusión que ha tenido, no solo en la localidad sino en la región. Es una jornada que va a quedar marcada para la familia de Mauro, que agradece a la comunidad que se ha volcado rápidamente a donar, colaborar y apaciguar un poco este trance que están pasando”, expresó el presidente comunal, Juan Pio Drovetta.
El adolescente de 16 años se encuentra internado en la ciudad de Rosario desde el pasado 25 de diciembre y necesita de frecuentes transfusiones ya que enfrenta un trastorno en la médula. “Sabemos que la demanda va a ser necesaria, por lo tanto vamos a tener otra campaña”, anticipó el presidente y confirmó que será el próximo 10 de febrero.
“Ya tenemos casi cubierto el cupo de la próxima campaña, así que estamos doblemente agradecidos con la gente, porque se ve que aflora este compromiso de solidaridad para con un chico”, confió el presidente y enfatizó: “Es una jornada histórica porque no creo que se haya dado una jornada de donación en la localidad”.
Por su parte, la coordinadora del Banco de Sangre del Hospital Italiano, Gabriela Jaramillo, sintetizó: “Queremos que el donante tenga una experiencia memorable y que podamos satisfacer las necesidades de este paciente. La comunidad es muy solidaria”.
Cabe destacar que, fiel a las acciones que caracterizan al equipo de trabajo que acompaña a Drovetta, entregaron a cada uno de los donantes, toallas de mano y pilusos que fueron confeccionados con impronta serodinense en el taller comunal.
“A todo hay que ponerle el mismo empeño, el mismo esfuerzo y la misma pasión para que los resultados siempre sean positivos. Estoy muy orgulloso de la sinergia que estamos logrando con el equipo de trabajo, que se sienten partícipes de algo muy importante. Estamos muy contentos de lograr esto con mucho compromiso, esfuerzo, tiempo, recursos y organización”, finalizó el presidente.