Gabriel Labat era un vecino de Serodino, profesor de educación física y amante el club Boca. Dejó su huella de amistad, cariño y cuidado como guardavidas en el natatorio en los últimos largos años. El sábado 24 de diciembre se descompensó en un trabajo de resistencia y falleció. La conmoción invadió el pueblo horas antes de la navidad.

En medio de una gran tristeza desde el Club lo despidieron con emotivas palabras: “Como empezar o como seguir luego de este golpe? Estamos en shock, paralizados, mirándonos a la cara unos a otros, perplejos, aturdidos, erráticos, será muy difícil poner palabras el sentimiento que tenemos como club y poder hacernos carne del dolor de la familia.

Mientras Gaby observaba atento todo lo que pasaba en la pileta y a su alrededor, como ese faro que desde donde levantaras la cabeza, veías. Siempre decimos que los clubes son el resultado de las personas que lo integran y nuestra pileta que siempre nos generó orgullo es el producto de ese trabajador invisible, al que nadie debía convocar; él había asumido un compromiso que superaba cualquier sub comisión, comisión o presidente de turno.

La pileta de Boca nunca era una duda porque estaba “El Gaby”, que no solo nos cuidaba a nosotros y a nuestros hijos, sino que garantizaba que en septiembre se verificaban las bombas, se armaba el grupo de colaboradores para limpiarla y pintarla para que los primeros días de diciembre se iniciara la temporada, esto era un hecho,era un compromiso a fuego que no requería conversaciones previas, ocurría siempre en nuestro querido Boca.

Seguramente cada uno de los que pasamos por el club en los últimos 20 años podemos tener alguna anécdota o alguna foto con él, siempre estaba a la hora y en el lugar indicado; tampoco podemos pasar por alto la escuela de natación que año tras año supera expectativas sumando generaciones que con el pecho inflado podrán decir “yo aprendí a nadar en el club Boca”, de la cual fue parte y promotor desde sus inicios.

Por todo esto, por ser parte activa y sobresaliente de esta hermosa familia Boquense, por cuidarnos cada día, por cuidar a nuestros hijos te decimos GRACIAS QUERIDO GABY, seguiremos adelante honrando tu ejemplo de trabajo responsable, dedicado y siempre rodeado de amigos, porque todos juntos,es el camino.

Hasta siempre querido Guardavidas, pasará el tiempo y te seguiremos viendo, rodeado de amigos en esa ronda interminable, custodiando y controlando todo”.