En medio de los reclamos conjuntos de la comunidad de Ricardone donde apuntan a las empresas de San Lorenzo, y dentro de su jurisdicción a Vicentin por el constante flujo de camiones y los trastornos viales que generan, sucedió la agresión en la noche de ayer a un trabajador de la Guardia Urbana. El tránsito sobre la AO12 fue complicado, y el malestar aumenta. 

La continua presencia de camiones complican el normal paso de los vecinos hacia la localidad. En consecuencia desde la comuna alzaron la voz para que las empresas paguen un canon, como lo hacen en otros municipios y comunas de la región, para paliar el costo de orden de tránsito generado y el desgaste del paso del transporte pesado.

Al enojo conjunto, elevado a las autoridades provinciales y nacionales por el jefe comunal Juan Carlos Doria, se le sumó un nuevo episodio de violencia donde resultó dañado uno de los móviles de la patrulla urbana local. 

En consecuencia, Doria solicitó la llegada de Gendarmería Nacional y la Policía de Seguridad Vial para que les garantice un mayor orden, ya que de ésta manera ponen en riesgo a los efectivos locales que se ven desbordados.