“Como comen cucarachas una buena forma de prevenirlos es fumigarlas, ya que si no hay cucarachas no hay alacranes”, afirmó el Doctor Carlos Damin, Jefe de Toxicología del Hospital Fernández y apuntó que eliminar las cucarachas es una de las principales acciones para combatir a los alacranes que, en época de verano, se observan con mayor asiduidad.
Tras la aparición de varios casos de picaduras de alacranes, el especialista afirmó que otro factor “fundamental” para combatir a esos insectos es la higiene: “La fumigación es relativamente efectiva, sobre todo para las cucarachas, pero la limpieza y la higiene son fundamentales para evitar accidentes”, aseguró en diálogo con Télam
Sobre las especies de alacranes presentes en la zona y su peligrosidad, el investigador del Conicet y experto en sistemática de escorpiones del Museo de Ciencias Naturales Andrés Ojanguren precisó que hay fundamentalmente dos: el “Bothriurus bonariensis” y el “Tityus trivittatus”. El ‘Bothriurus bonariensis’, no es peligroso, es el más oscuro, de pinzas negras y no tan común en la capital sino en las zonas parquizadas; y el ‘Tityus trivittatus’, que es venenoso, amarillo clarito con tres bandas negras, de pinzas finas y habita en túneles, subtes y edificios antiguos.
“En épocas veraniegas, con mayor humedad, sumado al caudal de lluvias, los espacios donde viven esos insectos de la familia de los arácnidos se inundan y esa es la causa de su aparición en la superficie, ya que suelen ingresar a través de rejillas, cañerías, cloacas, cables de luz y todo lo que conecta con el subsuelo de la ciudad”, completó.
“Como pueden estar en cualquier lado, se recomienda sacudir bien las prendas de vestir, el calzado y la ropa de cama antes de irse a dormir”, añadió por su parte Marcela Aliaga, del Centro Nacional de Intoxicaciones del Hospital Posadas.
Entre los síntomas posibles, Aliaga mencionó dolor fuerte en la zona de la picadura, sensación de que asciende por la piel y a la media hora aproximadamente vómitos y sudoración, así como taquicardia y piel pálida, y aclaró que “también existe la posibilidad que no haya síntomas, por lo tanto frente a la primer sospecha se debe asistir a una consulta médica, especialmente si se trata de niños y lactantes”.
En cuanto al tratamiento sostuvo que “depende de la sintomatología del paciente y su edad, ya que no es lo mismo un niño que un adulto”.
A principios de año, el Ministerio de Salud de la Nación publicó en su sitio web un instructivo para prevenir los ataques de estos arácnidos, en donde se recomienda entre otras cosas evitar caminar descalzo en zonas donde se conozca la presencia de alacranes y mantener un aseo cuidadoso y periódico de las viviendas y alrededores.
Fuente: Télam