Este 18 de mayo, se cumplió un nuevo aniversario de la desaparición de Paula Perassi, la mujer sanlorencina. Ayer, Alberto, el papá de Paula, estuvo en Oliveros acompañando a la familia y a los amigos de Marlene. “Lo que hicimos y venimos haciendo sólo se hace para pedir justicia, no hay nada más detrás de las marchas, sólo un pedido de justicia”, señaló Alberto.

Con el chaleco antibalas puesto, dejando de lado una importante audiencia que tenía por la tarde, Alberto estuvo en Oliveros marchando por Marlene, por Paula, pidiendo Justicia. Estuvo con Fm IRÉ y habló sobre su caso.

Tal como lo dijo el Juez Carbone, la Causa Perassi ha sido una causa muy manoseada durante estos cuatro años y ocho meses. “Todas las cosas raras que pueden suceder, pasaron en la Causa Perassi. Pero creo que hoy empieza a aparecer la verdad y a quebrarse la mentira, la billetera con dólares, el teléfono político. Por eso hay cuatro presos efectivos en cárceles y cuatro en prisión domiciliaria”, señaló Alberto. Y  acontinuación, sin dudar, añadió: “No estoy contento porque haya ocho presos, contento no es una palabra que yo pueda usar para nada. Mi línea es y siempre fue, encontrar los huesos de mi hija. Nunca trabajé para meter a alguien preso. Pero si es necesario que estas ocho personas estén presos para que digan qué hicieron con Paula, que lo estén”.

Una vez más, Alberto habló de “billetera con dólares”, de “teléfono político”, declaraciones que en algún momento molestaron al Juez Prunotto Laborde. “Creo que no le erré. Porque hoy tenemos otro fallo completamente diferente. Acá pasó que el Juez Carbone leyó la causa y antes no la habían leído. Cambiaron cosas, hubo contudencia de la Corte Suprema, hubo un cambio de Juez, cambió la audiencia”, señaló Perrasi y deseó: “Espero que sea el principio para llegar al fin”.

En este contexto, Alberto criticó que aún, a casi cinco años de la desaparición de su hija, la causa no haya pasado a la Justicia Federal. Y sobre esto, señaló: “Sigo insistiendo para que este caso debe ser un caso federal, porque hay desaparición forzada de persona, un embarazo, y cinco policías procesados”, y agregó: “La provincia tiene agarrado el caso, porque si lo sueltan y llega a la Justicia Federal cambiará la pena y a su vez no van a saber en qué momento les van a caer”.

En este sentido, remarcó que si la causa sigue en Santa Fe, la pena iba a ser de seis años, pero en tres iban a salir. Y cuando salgan, advirtió Alberto, pasarán por enfrente de mi casa burlándose y si así sucede la historia va aterminar mal finalmente. “Espero que esto no pase”.

En el trascurso de estos años, mucha gente acompañó a Alberto, sin embargo, el primer año y medio tal como él dijo, estuvo sólo. “La gente tenía otra visión pero yo seguí luchando y hoy en día la geste sabe qué paso, busca justicia como yo y no quieren que quede impune”, dijo y agregó: “Estamos frente a una banda que desaparece a una persona en democracia, sin dejar rastros. Pero además, hay un juez que detrás de bambalinas, dijo que la incineraron. Entonces, hay que tener muchísimo cuidado”.

Y a la gente de Oliveros, le pidió que se despierten, que no teman que salgan a la calle a luchar por la justicia. “Por supuesto que debe haber miedo en la gente de Oliveros, y seguramente haya gente aquí en la localidad que se dedique a meter miedo como sucedió en mi causa, pero no hay que encerrarse, hay que salir afuera y buscar soluciones, pedir justicia. Un caso tan terrible no puede quedar en el olvido”.