Días atrás, comenzó la campaña de excavación en el Fuerte Sancti Spiritus de Puerto Gaboto con el objetivo de conocer que pasó en ese lugar hace casi cinco siglos atrás. En el año 2010, se halló el lugar exacto donde se encuentran emplazados los vestigios del Fuerte Sancti Spiritus.

“Desde el 2006 comenzamos a encontrar materiales, hasta el 2009 no sabíamos si ese era realmente el sitio. Y en 2010, cuando llegaron los arqueólogos vascos aplicamos una nueva metodología en extensión que nos permitió ver la superficie de lo que estaba pasando ahí. La excepcionalidad que tiene el Fuerte es que contas con los relatos y tenés una instantánea bastante precisa de lo que sucedió, podes ver lo que ocurrió entre 1527 y 1529; pocos lugares tienen esa excepcionalidad”, indicó Fabián Letieri, uno de los arqueólogos miembro de la expedición, esta mañana en diálogo con IRE.

Según indicaron los arqueólogos, si bien había muchas improntas de palos, el muro del Fuerte era de tierra compactada y apisonada. “El hallazgo de la tapia es la realidad constructiva que irrumpe”, expresó Letieri.

En este proceso de búsqueda, se han encontrado diferentes objetos como cerámica indígena, sobre todo, pero también cerámica europea, cascabeles, clavos, cuenta vidrios, objetos en madera, pedacitos de lata y hasta dados, lo cual llama poderosamente la atención porque en aquel tiempo, los juegos de azar estaban prohibidos. “En otros sitios se han encontrado siete dados, acá encontramos 60; son de hueso, más chiquitos, seguramente los traían escondidos”, explicaron.

“La expedición de Sebastián Gaboto fue muy transgresora, en primer lugar porque él no tenía que venir hacia acá y en segundo lugar, porque desobedece el contrato firmado con el rey, por lo que creemos, fue porque tenía conocimiento de las riquezas que había en esta zona. Sebastián Gaboto fue a juicio por su comportamiento pero no fue desterrado de su lugar como sucedió con otros”, relataron y señalaron que según los documentos recabados, Gaboto era un personaje fuerte, con carácter y determinación.

En cuanto al proceso de excavación los arqueólogos coincidieron en que este proyecto iba a transformar la realidad de Puerto Gaboto. “Nos interesa que este proyecto tenga un impacto sociocultural en beneficio de la comunidad y nuestra idea es colaborar en alguna medida mejorando la calidad de vida de los gaboteros”, dijo Luciano Rey y agregó: “Esto va a transformar la realidad de Puerto Gaboto si se involucran las distintas áreas del Estado. Si los distintos niveles estatales trabajamos articulados, los resultados van a llegar más rápido y vamos a tener un proyecto exitoso”. 

Hoy en día, el acceso al predio es restringido por no estar dadas las condiciones para preservar el lugar ya que en este momento, se están realizando las excavaciones. “Creemos que en dos años ya vamos a tener las instalaciones adecuadas para que los vecinos de la región, de la provincia y del país puedan disfrutar de este patrimonio cultural”, indicó Rey.

El Ministerio de Innovación y Cultura de la provincia de Santa Fe ya adquirió dos terrenos, uno es el lugar conocido por los gaboteros como “lo de Román”, mientras que la otra propiedad pertenecía a la Comuna local. “La idea es evaluar, a partir de lo que surge en las excavaciones, qué lugar conviene comprar. Nosotros no queremos irrumpir en el paisaje si no, llevar este paisaje a lo más parecido de lo que pudo haber encontrado Sebastián Gaboto. Por eso estamos trabajando junto al Ministerio de Medio Ambiente donde vamos a realizar un vivero de plantas nativas para forestar, de a poco, el lugar”, explicó Rey.

“La campaña de excavación fue un poco lenta, pero porque se dictó un curso que es muy positivo, porque se enseñó una metodología poca utilizada en la provincia de Santa Fe. Lo importante es que quedarán arqueólogos santafesinos formados en esta metodología”, indicó Letieri.

“A los vecinos que les interese, que tengan dudas pueden acercarse a charlar, a hacer preguntas, nos pueden encontrar durante este mes, todos los días”, expresó Luciano Rey.