Desde el mes de septiembre la papelera, que fue una de las mayores generadoras de fuentes laborales para Pueblo Andino, no produce. Los trabajadores cobran su salario reducido a la mitad y en los últimos días comenzaron los despidos: Llegaron cinco notificaciones.

Los inconvenientes en la producción datan desde ya algunos meses, desde septiembre las rondas de trabajo se limitaron y las que se sostienen son sobre todo las labores de mantenimiento.

En los últimos días la situación se agravó y habrían comenzado a reducir personal. Tal como confirmó IRE, cinco empleados fueron despedidos. Otra planta que pertenece al mismo empresariado y está instalada en el gran Rosario atraviesa una situación con las mismas complejidades.

Según trascendió, el titular de la firma estaría enfrentando complejos problemas de salud por lo que las decisiones sobre la planta no serían prioridad y estarían a cargo de los profesionales que lo asesoran.

Hasta el momento no hay una comunicación ni versión oficial sobre la situación. Mientras tanto, en afán de no perder las esperanzas, se sostiene que la agonía es síntoma de que “tienen intenciones de reactivarla”.