De no creer. Vecinos de Pueblo Andino llegaron a su casa de fin de semana, ingresaron por la parte de atrás y observaron que personas extrañas habían usado el sector. Al revisar la vivienda encontraron una puerta forzada y una ventana rota. Los malvivientes se alzaron con una importante cantidad de herramientas, mientras que a su vecino le vaciaron la heladera. Habrá una reunión con autoridades comunales por el tema seguridad el próximo sábado a las 16. 

Ayer pasadas  las 19.15 una familia de Rosario llegó a su casa de fin de semana ubicada en Pedro Remondino al 300 en el Barrio Quebrada de Andino II. En una primera instancia parecía que estaba todo bien, pero los alarmó que entraron por el patio y vieron que al lado de la pileta había una botella de sidra que estaban seguros que ellos no la habían dejado ahí.

En consecuencia, revisaron la parte de atrás de la vivienda y notaron que la puerta del baño que tiene acceso a la casa estaba “barroteada”. Así lo describió Analía, la propietaria de la vivienda, a IRÉ. Inmediatamente su marido se alarmó e ingreso a la casa donde se dieron cuenta que la única ventana que no tiene rejas tenía el vidrio explotado.

“Estaba todo dado vuelta, me rompieron cosas, se llevaron una chuchilla de la cocina y herramientas como motosierra, amoladoras circulares, todas herramientas que usamos para trabajar en la casa”, narró la mujer. Pero no sólo fue lo que se llevaron, sino que también hicieron daño ya que en la habitación tenían cajas con ropa y frazadas que “rompieron y tiraron por todos lados”.

En el costado de la casa visualizaron que los malvivientes habían “perdido algunas herramientas y una luz de emergencia que no era nuestra, sino que era del vecino a quien también le habían violentado la puerta”. Así descubrieron el segundo episodio de inseguridad.  En la casa contigua no robaron cosas materiales sino que se llevaron toda la comida de la heladera y la sidra que encontraron al lado de la pileta.

Como si fuera poco con lo sucedido hasta el momento a la noche fueron hacer la denuncia a la comisaria de la localidad pero “no la tomaron porque no les andaba la computadora”. Recién hoy pudieron radicar la denuncia, fueron en conjunto con la otra familia afectada. 

Cabe destacar que durante la madrugada un patrullero “hizo guardia en las casas” ya que no tenían medios para volver a cerrarla.

Imagen ilustrativa.