El gobierno comunal de Pueblo Andino firmó un convenio con la Agencia Provincial de Seguridad Vial para la colocación de siete cinemómetros en los distintos accesos de la localidad, con el objetivo de realizar controles de velocidad.
El presidente comunal, José Abraham, explicó a IRE que uno de los principales problemas se genera sobre la Ruta Provincial 26s, donde suele haber excesos de velocidad en un tramo de casi siete kilómetros de zona urbana, que atraviesa distintos barrios.
Se prevé también que la colocación de los cinemómetros ayude además al normal desarrollo de los controles de tránsito y a la identificación de los vehículos, que a su vez sería útil de manera indirecta para la seguridad del pueblo.
Los siete artefactos estarán colocados en distintos accesos al pueblo, algunos en doble mano, entre ellos la Ruta Provincial 91, donde también se han registrado excesos de velocidad, sobre todo por parte camiones que transitan en el tramo entre Serodino y Villa La Ribera.
En conjunto con los cinemómetros se colocará la cartelería correspondiente y previamente se realizarán anuncios con folletería para intentar generar una concientización colectiva sobre la seguridad vial.
Un complemento para la obra del desvío de camiones
“Esto va a ayudar con la obra que se licitó recientemente para el desvío de tránsito pesado, ya que los camiones no deberían circular ni llenos ni vacíos por el tramo de Ruta 91”, dijo Abraham.
Y añadió: “Actualmente, cuando los camiones vienen desde Serodino y cargados, deben tomar velocidad para poder subir el puente de autopista, sobre todo los modelos viejos, y sobrepasan los 60 kilómetros por hora permitidos. Y cuando salen del puerto vacíos, también exceden la velocidad”.
“Una vez que esté el desvío de tránsito pesado, va a estar prohibido que los camiones cerealeros circulen por ese tramo de Ruta 91 y esto ayudaría a controlar. Va a ser una cuestión de doble multa, por exceso de velocidad y por circular por donde no corresponde”, sintetizó.
Mayor autonomía en el control de tránsito
Por otra parte, el presidente comunal explicó: “Antes, sabiendo que los camiones infringían algunas normas, como estacionar en doble fila sobre la banquina, no podíamos multar por ser una ruta provincial y no ser competencia de nuestra localidad. A partir de este convenio, vamos a poder controlar y multar no solo en calles internas, sino también sobre la ruta, tendríamos una forma legal de ejecutarlas”.
“Era una desprolijidad que los vecinos nos reclaman y nosotros mandábamos a la guardia urbana, pero no podíamos hacer más que un ordenamiento de tránsito o pedir de buena manera que circulen y que no se detengan”, agregó.
Según explicó Abraham, hay tramos, sobre todo en los accesos, en donde la velocidad máxima será de 60 kilómetros por hora, como por ejemplo en Ruta 26s. En tanto, un tramo de la Ruta 10 tendrá velocidad máxima de 40, mientras que en las calles internas del ejido urbano se permite una máxima de 20 kilómetros por hora.