En el marco de la inminente cosecha gruesa y el gran arribo de camiones a la región, el estado de la traza de ruta 91 en el ingreso a Pueblo Andino, la falta de iluminación y las frecuencias del transporte, se convierten en problemas claves a resolver. “La gestión es incansable, no paramos nunca, pero las respuestas no son tan rápidas ni son todas las que necesitamos”, afirmó a IRE el presidente comunal, José Abraham, sobre los pedidos a Provincia y Nación.
Si bien, según el presidente comunal, se vienen intentando gestiones desde hace cuatro años, recién en los últimos dos, tras el cambio de gobierno provincial, empezaron a obtener respuestas favorables. “No son las respuestas que buscamos, pero estamos teniendo algunos paliativos que llegan de a poco”, dijo.
Y puntualizó: “En este momento hay un inconveniente muy grande con el estado de la subida a la Ruta 91 sobre autopista y que se da en el peor de los momentos, cuando la cosecha gruesa ya está encima y se están empezando a ver largas filas de camiones”.
Pese a que no hace mucho se realizaron reparaciones sobre la mencionada traza, Abraham consideró que “cuando los arreglos no se hacen de base, tienden a durar poco”. Sobre todo en una zona donde a diario miles de camiones se detienen y todo su peso se asienta sobre la cinta asfáltica, provocando deformaciones y pozos.
Siguiendo esa misma línea, detalló: “Los camiones frenan de manera continua y el deterioro es mucho más rápido que en otros lugares, y las capas de reparaciones que hicieron, duran muy poco. Cada cosecha hay que estar haciendo una reparación nueva”.
Y agregó: “Imagino que para hacer un buen trabajo hay que partir de la base, levantar la toda la cinta asfáltica, volver hacer toda una compactación, y posterior a eso, hacer una capa de asfalto que pueda soportar este tipo de tránsito. Un trabajo así debería hacerse en un momento donde hay poca cosecha, para que los cortes se den con menos complicaciones. Es una pena que no se haya hecho la obra en el momento que correspondía”.
Por último, refiriendo a por qué no llegan las obras, señaló que desde Vialidad le explicaron que tiene que ver con la no aprobación del presupuesto de Nación y eso derivó en Provincia, cuyo presupuesto se aprobó recién la semana pasada. En ese marco, desde la dirección del organismo provincial, le anticiparon que existe la posibilidad de que la reparación sobre Ruta 91 se haga en breve. “Sería un paliativo, no una solución de fondo”, anticipó el presidente comunal.
Iluminación defectuosa
Por otra parte, hizo referencia a las luminarias y señaló que el problema de su incorrecto funcionamiento viene arrastrándose desde comienzos del año pasado. Y si bien el mantenimiento le corresponde a Vialidad Provincial, comentó que desde el organismo le trasladaron que solo cuentan con dos cuadrillas que se encargan de las reparaciones eléctricas en toda la provincia, por lo que a veces no dan abasto.
En principio, según aclaró Abraham, hubo un cortocircuito en un cable subterráneo debajo de la cinta asfáltica y respecto de esa situación, comentó: “Encontramos el problema, lo solucionamos y se puso en marcha el funcionamiento de columnas, pero hay muchas lámparas quemadas”.
En ese sentido, confió que a través de un proyecto presentado, la comuna le propuso realizar los mantenimientos y el recambio de luminarias por luces led y Vialidad lo aprobó. “El problema es que no nos llega el depósito de provincia para que hagamos el trabajo”, indicó.
Transporte público
Otra de las problemáticas en el marco de la cosecha gruesa tiene que ver con el paso del transporte interurbano de pasajeros y respecto de esa cuestión, aseguró que pidieron a la empresa Rosario Bus más confluencia de vehículos y que se apunte más a los horarios escolares.
“Hemos hecho ese pedido a finales del año pasado para que el niño no viaje muy justo sobre la hora y tenga que andar corriendo o que tenga que esperar mucho en la garita de colectivos. También están las complicaciones de tránsito que complican las cosas y todo se altera”, señaló.
Por último, indicó que prevén construir una garita sobre la Ruta Provincial 10, por donde presta servicio la empresa Serodino, con quien también hicieron “algunos arreglos”, según indicó el presidente comunal.