La inflación en nuestra provincia fue similar a la nacional en abril pasado. El Índice de Precios Consumidor que mide el Instituto Provincial de Estadística y Censos aumentó 3,4 por ciento el mes pasado. Y como acumula una suba de 15,4 por ciento en lo que va del año, superó la pauta de aumento salarial anual acordada entre el gobierno provincial y los gremios estatales. Así, con los sueldos de junio, a cobrar en julio, comenzará a aplicarse a la cláusula gatillo contemplada en ese convenio.

El Ipec difundió ayer los datos de inflación de abril, que se movieron en línea que con la cifra que informó la semana pasada el gobierno nacional.

La suba del 3,4 por ciento en el IPC fue 0,5 punto inferior a la de marzo, que había sido menor al promedio nacional. Contra fin del año pasado, el incremento fue de 15,4 por ciento y, en doce meses, de 56,9 por ciento.

Con los resultados de abril, la inflación volvió al nivel de enero pasado, cuando también se había ubicado en la zona de 3,4 por ciento. En febrero y marzo, el IPC presentó subas de 3,9 por ciento cada uno.

La evolución del Indice de Precios al Consumidor de Santa Fe durante 2019 superó el porcentaje de aumento salarial pactado como arranque en la paritaria provincial. Este fue de 15 por ciento anual, en dos tramos: 12 por ciento en marzo y 3 por ciento en junio.

A partir de ese piso, se activa la cláusula gatillo, diseñada para que los salarios de los trabajadores estatales de la provincia no evolucionen por debajo del índice inflacionario.

Ese ajuste se aplicará con los salarios de junio, a cobrar en julio. En esa fecha, los empleados públicos sumarán el 3 por ciento del tramo pendiente más el 0,4 por ciento correspondiente al desfase de la inflación de abril.

La cláusula gatillo se aplica con dos meses de diferencia. De tal modo que la diferencia de abril se pagará con el sueldo de junio. En tanto, la diferencia que exista en mayo se cobrará con salario de julio, que se paga los primeros días de agosto, y así sucesivamente.

El año pasado, en que se aplicó también la cláusula gatillo, los agentes públicos cobraron a diciembre un incremento salarial de 41 por ciento, que se correspondió con la inflación acumulada a octubre.

A esa cifra, se le sumaron luego la inflación de noviembre y diciembre, que se cobraron en enero y febrero de este año, lo que representó una incremento total del 49,3 por ciento.