Los turistas que se encontraban disfrutando la tarde en el balneario de Piedras Blancas en la provincia de Entre Ríos, vivieron un episodio de pánico a la vera del río Paraná cuando una serpiente de gran tamaño salió del agua. 

El intendente local, Jorge Fabricio Gino Mesquida, señaló que este tipo de reptiles no genera peligro para las personas, siempre y cuando no se vean amenazados. Por su parte el biólogo Alfredo Berduc, coincidió con el intendente Mesquida y aseguró que la serpiente es inofensiva.

Se trata de la víbora curiyú, conocida popularmente como anaconda amarilla, especie que se encuentra en serio peligro de extinción.

“Algunas de las personas que estaban disfrutando de nuestras playas durante el último fin de semana se alarmaron por la aparición de la curiyú. Ante esta situación, el cuerpo de guardavidas actuó de manera inmediata, capturándola y depositándola sana y salva en la reserva natural El Brete que es un área protegida”, aseguró el jefe comunal.

“Su nombre científico es Eunectes Notaeus, se la llama también anaconda amarilla. Es una boa constrictora que en ese tamaño no representa peligro alguno. Si se la hostiga, puede morder, pero no tiene veneno y no es peligrosa para los seres humanos”, aseguró Berduc.

Fuente: UNO Entre Rios – DLP (Video)