El edificio de la nueva escuela primaria en el barrio Villa Elena es uno de los grandes desafíos que encabeza la comuna de Oliveros. El sueño comenzó detectando la necesidad allá por el 2018, y si bien pasaron gestiones y promesas “siempre estuvimos solos”, reconoció Martín Calori, el presidente comunal. Ahora, luego de firmar un POU (Programa de Obras Urbanas) con el gobierno de Pullaro le adjudicaron al pueblo 90 millones, en tres aportes, que se invertirán en el proyecto. “Estamos muy contentos”, resumió mientras llegaban los materiales para reactivar la obra de dos mil metros cuadrados.
Varios grupos de trabajadores estaban por sectores en el edificio en construcción: Algunos desmalezaban, otros instalaban el sistema de iluminación y seguridad, otros bajaban materiales. Yendo y viniendo, estaba el presidente de la comuna de Oliveros, Martín Calori, quien no dudó en visibilizar en IRÉ: “Estamos muy contentos. El mes de abril del 2018 arrancábamos con las primeras alineaciones, y hoy estamos de vuelta con todos los chicos. Bajando hierro y maderas, para hacer el encofrado, para techar de una vez por toda esta escuela“.
En ese sentido, avanzó: “Vienen 40 días de aquí en adelante a pleno en este lugar. En 40 días vamos a terminar todo lo que es el trabajo de vigas, y después vamos a vamos a techar”.
Sobre el impulso económico para continuar con la infraestructura donde funcionará la nueva escuela primaria, la comuna de Oliveros firmó un acuerdo dentro del Programa de Obras Urbanas (POU) en el que le adjudicaran unos 90 millones de pesos en tres etapas: “Recibimos la primera cuota, le agradezco al señor Enrico Lisandro, el Ministro de Obras Públicas, y al senador Hugo Rasetto. En marco del convenio, estamos invirtiendo en esta escuela. Hasta acá siempre hemos estado solos“.
Situación que pese a los esfuerzos complicó la continuidad, con muchas expectativas Calori reforzó: “La vamos a terminar, porque los chicos tienen que estudiar. Oliveros se está poniendo cada vez más grande, hay una demanda muy importante, y tenemos que terminar la escuela”. Y no dudó al remarcar: “Acá hay mucho sacrificio, mucho pulmón. Acá hay mucha garra, huevo y corazón”.
