La historia de lucha de Santino Ledesma conmovió a muchas familias oliverses que los acompañan en las últimas semanas. El pequeño de once años transita uno de los momentos más difíciles con su estado de salud. Su mamá, Marisa Ruiz, en dialogó con IRÉ agradeció a todos los que se solidarizaron con ellos através de la movida solidaria que organizó el Movimiento Evita Oliveros, destacó que su cabeza y corazón hoy están en el Sanatorio junto a su hijo, y ante el frágil estado del nene enfatizó: “Le pido a todos que recen por él”. 

Santino nació a los seis meses de gestación, a los quince días de vida tuvo una hemorragia grado IV que le dejó secuelas, una parálisis del lado derecho con pérdida de la visión del ojo de ese costado. En el 2015 tuvo varicela y en vez de exteriorizarse le afectó los órganos internos, allí se le dificultó el funcionamiento de sus riñones, pulmones, y desde entonces debe usar un botón gastrico. 

Pero con una gran lucha en familia, lograron enfrentar la situación. Así lo describió Marisa: “Seguimos adelante, el iba a la escuela Santa Mónica. Le hicimos rehabilitación”. Todo parecía mejorar hasta hace unos meses atrás que comenzó con convulsiones: “Tiene hidrocefalia y empezó con convulsiones que desparramaron el líquido en toda la corteza crebral, por eso lo intervinieron hace un mes”. 

La familia está hace semanas que se organiza para acompañar a Santino en el Sanatorio de Niños de Rosario, debido a que no hay plazos sobre su recuperación. Es más, por un deterioro, en los últimos días los médicos tomaron la determinación de trasladarlo a una sala de cuidados intermedios para que esté más tiempo con sus papás y hermanos, debido a que consideran que hicieron todo lo que está a su alcance.  

Ante el difícil momento que les toca enfrentar, Marisa contó que están más juntos que nunca con su marido Bruno que trabaja en INTA y sus otros tres hijos: “Hablamos mucho de lo que puede llegar a pasar. Tratamos de entre todos sobrellevar la situación”.

“Mi hijo está en las manos de dios, le pido a todos que recen por él”, expresó la mamá. Santino desde que nació peleó por su vida, pero reconoció que hoy “Esperan un milagro”.