Gracias a la colaboración de una gran cantidad de vecinos, el cuartel de Bomberos Voluntarios de Oliveros recolectó más de 6.000 bositas de golosinas para repartir a los niños junto a Melchor, Gaspar y Baltasar.

“Para nosotros, ver las caritas de niños y grandes, aplaudiendo, con lágrimas en los ojos, es la mejor recompensa al esfuerzo”, expresaron desde el cuartel que año a año sostiene esta mágica tradición para sacarle una sonrisa a los más pequeños.

Hace semanas que habían comenzado a seleccionar en bolsitas los dulces, y a recibir donaciones para que Melchor, Gaspar y Baltazar tengan las manos llenas al pasar por el frente de la casa de los chicos.

“Gracias infinitas a todos y cada uno que con su aporte logró que se realizarán 6100 bolsitas de golosinas, a quienes saben entender el desgaste físico de todos”, agradecieron los bomberos. 

“Ayer quedó demostrado: sacrificio, valor y abnegación siguen siendo el lema que tanto motiva al personal del cuartel”, señalaron y agradecieron en la institución, luego de un recorrido de casi cuatro horas de duración para llegar a la mayor cantidad de niños posible.