El gremio de los trabajadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) volvió este martes 8 de noviembre a reclamar por una recomposición salarial, con una jornada nacional de 24 horas de protesta. En Oliveros se apostaron frente al ingreso a la estación experimental, a la vera de la Ruta Nacional 11, realizando una movilización y asamblea permanente. “Estamos en una situación crítica”, expresaron.

En diálogo con IRE, el delegado de APINTA, Miguel Gómez, explicó que “entre un 10 y un 15 por ciento del personal se encuentra por debajo de la línea de la pobreza”, conforme al informe del Instituto de Estadística y Censos (INDEC). “Hay compañeros que no llegan a completar la canasta básica familiar. Es lamentable”, resaltó.

“Llegamos a una situación límite”, enfatizó y comentó que ya tenían aprobado un plan de lucha a nivel nacional, por lo que acataron la medida, donde cada seccional definía qué medidas tomaba en el marco de la jornada de lucha.

En Oliveros se lleva adelante una movilización frente a la estación experimental con asamblea permanente, en reclamo de una mejora salarial. “Estamos en una situación crítica”, sostuvo.

“Perdimos entre un 40 y 50% de poder adquisitivo en los últimos 6 o 7 años. Estamos en el ranking 128 de 136 de las empresas del estado. La situación es lamentable, porque según las autoridades somos una institución que aporta al proyecto de país, entonces nos extraña que no nos reconozcan los salarios. Aún con salarios bajos se sigue trabajando. Tenemos que ser reconocidos como nos corresponde, con salarios dignos”, abundó Gómez.

Vale mencionar que la semana pasada también hubo un paro nacional con alto acatamiento de los trabajadores. “La gente está muy enojada porque los salarios no les alcanzan”, destacó el delegado en Oliveros, quien adelantó que el próximo viernes 11 está prevista una reunión, donde se definirá si la propuesta del gremio es aceptada o hay una contrapropuesta superadora.

“Esperamos tener una respuesta que satisfaga las necesidades de los trabajadores porque si no tenemos respuestas en estas semanas, no las vamos a tener hasta el año que viene. No nos podemos quedar esperando, por eso las medidas de fuerza se siguen realizando”, dijo Gómez. Caso contrario, se prevé una medida de fuerza por 48 horas. “Tratamos de ser optimistas. Todo depende de las respuestas que tengamos”, finalizó.