Un ciervo herido sorprendió a una familia de Oliveros en un baldío cercano a su casa. Habría sido atacado por perros y en medio de la desesperación y el estrés quedó tendido sobre el césped.

Los vecinos rápidamente se pusieron en contacto con la policía y un médico veterinario para ponerlo a salvo. Tras la llegada del profesional, constataron que el animal se encontraba en un preocupante estado de estrés, por haber sido atacado por perros. Incluso tenía mordeduras en sus cuartos traseros.

Luego de que lograron asistirlo, se convocó a la sección ecológica de la Policía Comunitaria y procedieron al resguardo del animal para su posterior traslado a la granja La Esmeralda de la ciudad de Santa Fe.