Cuando la alegría copaba todos los rincones con un fin de semana donde Oliveros volvió a encontrarse en sus espacios públicos, para celebrar el espíritu navideño la Fundación Abba, clave en la organización, descubrió que delincuentes habían entrado a su lugar de exposición, revolvieron todo y robaron. Transitando la conmoción, en medio de la conjunción de emociones, puntualizaron: “Ayer, muy felices. Hoy, dolidos pero felices. Y mañana, de nuevo a trabajar con la alegría de siempre”.

Gabriela Bonifacio, presidente de la Fundación Abba, decidió publicar un comunicado sobre todo para evitar que sigan comprando con quien ofreció los insumos en los últimos días: “Y cuando vivíamos otro de los momentos hermosos de la semana del espíritu navideño, nos estaban robando. Alguien entró en nuestro local de exposición y nos revolvió todo“, explicó.

Sobre lo que se llevaron, aún no está claro: “Todavía no terminamos de saber qué cosas nos faltan, pero sí sabemos que alguien estuvo vendiendo souvenirs y estampitas, que si constatamos que nos faltan”. Cierto es que esos insumos fueron ofrecidos en la misma comunidad: “Muchas personas nos contaron que anoche compraron para ayudar a quien las vendía, obvio, sin saber que eran robadas”.

Y siguió: “Hoy vamos a constatar qué otras cosas faltan, pero por lo pronto esperamos que no le compren más. Ya todo esta en manos de las autoridades pertinentes y hecha la denuncia. Esperamos no tener que lamentar la falta de muchas cosas”. Las cámaras cumplen un rol clave y el dispositivo para dar con el o los ladrones está activado.

En paralelo, enfatizó: “Queremos contarles que este hecho ni por asomo nos quita la alegría de lo vivido en esta semana. Mientras tanto seguiremos siendo una institución de puertas abiertas. Este hecho aislado no nos quita ni un poquito las ganas de seguir creyendo en cada persona que se acerca a nuestra institución”. Y resumió las emociones: “Ayer, muy felices. Hoy, dolidos pero felices. Y mañana, de nuevo a trabajar con la alegría de siempre“.

“Este hecho aislado no nos quita ni un poquito las ganas de seguir creyendo en cada persona que se acerca a nuestra institución”

El lamentable episodio desató una gran ola de solidaridad de instituciones y vecinos para con los integrantes de la fundación, en ese sentido Bonifacio cerró: “Muchas Gracias a quienes, enterados de esto, nos hacen llegar su preocupación y gestos de valoración y cariño“.