Con el tono de voz ajustado por la tristeza, Julieta Isidori, periodista y locutora, parte del equipo de IRÉ por dos años detalló cómo viven los estadounidenses una de las peores tragedias de su historia: La masacre de Las Vegas.  

Se habla de la peor masacre que vivió Estados Unidos con cincuenta muertos y más de 500 heridos. Sucedió este domingo por la noche donde un masculino de unos 65 años desde la habitación y casino Mandalay Bay disparó hacia un concierto donde había unas 30 mil personas.

En contraposición con las primeras versiones, Julieta apunta que “El culpable, el agresor que disparó desde la habitación y luego se quitó la vida, de todas formas fue reducido por la policía. Aunque era muy tarde”.

Detalló que hasta el momento se dieron a conocer sólo algunos datos de las personas que perdieron la vida. El movimiento es contínuo y la ciudad está de luto: “Desde las seis de la mañana de acá en Las Vegas hay gente donando sangre y haciendo cola en los Hospitales para ayudar a aquellos que sufrieron heridas y que están en muy mal estado”. 

“Una ciudad que amaneció triste, con ambulancias y policías. Sirenas que se escuchan constantemente”, amplió compungida. Y amplió hacia la posibilidad de que sea un nuevo atentado: “Hasta el momento no hay certezas si el agresor tuvo o tiene alguna relación con el estado Islámico, aunque ellos ya se agreditaron un vínculo. Todavía la policía no confirmó el dato”. 

Otro tema que se pone en foco es la legalización de los armamentos: “Lo que se está averiguando si el arma esta persona portaba un arma legal. De todos modos el estado de Nevada, que es donde pertenece la ciudad de Las Vegas, es un lugar donde se puede portar armar de modo legal lo que significa que no habría forma de culparlo, más allá de que haya falledido”, detalló. 

En consecuencia brindó su observación personal: “Es una locura más que se vive en este país por la posibilidad de que cualquier persona pueda portar su arma de manera legal, y a nivel personal más allá de lo que pasó dudo que ésto se revierta”. 

El contacto con IRÉ se dio pasadas las 13, en relación a la realidad de Las Vegas indicó: “Acá son las 9.30 de la mañana, recien me levanto con una tristeza terrible, se me hizo muy dificil poder dormir. No senti los disparos, vivo a uno quince o veinte minutos de donde fue la tragedia. No escuché nada, pero mis compañeros de trabajo se pusieron en contacto automaticamente para saber como estábamos”. Y avanzó: “Por suerte no tengo a ningun conocido o familiar víctima de lo que sucedió. De todas formas la ciudad está en una crisis total”. 

El aeropuesto redujo los vuelos y recien se estaba comenzando a normalizar, al igual que la avenia central.  El miercoles vse espera la visita de Donald Trump a la ciudad.