El mercado de los combustibles en Argentina experimentó una nueva variación en su estructura de precios. En esta ocasión, el Gas Natural Comprimido (GNC) fue el protagonista, ya que las principales petroleras del país, Shell e YPF, implementaron un aumento del 20% en su valor. Esta medida se dio a conocer después de que las petroleras privadas subieran sus precios y YPF siguiera sus pasos con su propia actualización tarifaria.

El incremento en el precio del GNC  fue un impacto directo en los consumidores argentinos. Las estaciones de servicio elevaron el costo promedio de este combustible, generando preocupación entre aquellos que utilizan vehículos a gas natural comprimido como una alternativa más económica y amigable con el medio ambiente.

Shell ajustó el precio del GNC de $194,80 a $249,80, mientras que YPF dejó atrás los $194,50 para establecer un nuevo valor de $249,50.

Ante este escenario, los consumidores se encuentran enfrentando un mayor gasto en sus desplazamientos diarios.