El presidente de la Nación, insiste en que el confinamiento sirvió para contener el virus hasta hoy y estima que el pico de la pandemia llegará en los próximos treinta días. En ese contexto, Alberto Fernández, analiza con su gabinete y comité de expertos que margen de flexibilidad se puede dar a determinadas actividades en algunas provincias del país.

Por el momento, en el Gobierno se evalúa anunciar la extensión de la cuarentena obligatoria hasta el 10 de mayo inclusive y Fernández respalda esta muy probable decisión en tres argumentos básicos:

  1. Argentina tiene una tasa muy baja de muertes, y la comparación con España, Italia y Estados Unidos es clave para justificar su prórroga hasta el 10 de mayo.
  2. El pico de la pandemia se corrió hasta mediados de mayo y más tiempo de confinamiento implica más posibilidades de achatar la curva.
  3. La apertura indiscriminada de la cuarentena puede causar una mayor cantidad de víctimas, y el retroceso significaría prorrogar el confinamiento más allá de los cálculos previos.

Asimismo, el presidente se encuentra en permanente consulta con gobernadores e intendentes, y por eso aún no decidió si será necesario repetir las videoconferencias que utilizó antes de ordenar las sucesivas fases de la cuarentena.

Si no modifica su agenda de trabajo, el Presidente convocará a los medios antes del fin de semana para transmitir sus razones respecto a la necesidad de extender la cuarentena por catorce días más.

También, el jefe de Estado revisará nuevos planteos de gobernadores e intendentes para ablandar la cuarentena, pero sigue descartando los espectáculos públicos, la apertura de las fronteras para extranjeros y toda actividad productiva que implique contacto social en los espacios públicos.

Fuente: Infobae