Este sábado, el presidente de la nación, Mauricio Macri, dará comienzo a su cierre de campaña iniciando en Barrancas de Belgrano en la ciudad de Buenos Aires así se altere el protocolo de la seguridad presidencial. Desde el gobierno anticiparon que, en la gira, puede hablar desde una camioneta, el vagón de un tren, un camión o un tractor.
En cada destino de las visitas pasadas, se buscó una locación abierta al público y se puso en contacto con funcionarios locales, entidades educativas y cooperativas para fomentar la convocatoria. Y si bien los actos tienen producción previa, también habrá lugar para imprevistos.
Fuentes cercanas al presidente reconocieron que no tendrán cobertura total para eventuales protestas. “Vamos a asumir riesgos”, reconocieron en Pro. La exposición había sido más controlada en la previa a las PASO, donde los actos fueron en lugares cerrados y controlados, con acceso restringido para evitar escraches. Con Macri jugando sus últimas fichas, el operativo tendrá más protagonismo de los “voluntarios” de Juntos por el Cambio, que relajaría los esquemas de la seguridad presidencial.
Si bien todavía se ultimaban detalles para el acto en Barrancas de Belgrano, que se cree que será uno de los más convocantes, y se evalúa que el Presidente llegue a los parques en el tren Mitre, tal como lo hizo en la región a bordo del Belgrano Cargas, destacando que la unidad Mitre es de transporte de pasajeros y arribaría junto a ciudadanos.
“En la gira Macri puede hablar desde una camioneta, el vagón de un tren, un camión o un tractor”, comentaron en el oficialismo y aseguraron que “quieren rehuir al acto tradicional” y permitir “el contacto directo con los argentinos”.