Entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2016 hubo 322 femicidios, es decir, casi 1 por día. La cifra corresponde al Registro Nacional de Femicidios en la Argentina confeccionado por el Movimiento de Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá). Este año.
La coordinadora Nacional del organismo, Raquel Vivanco, sostuvo que el Estado sigue sin incorporar en su agenda esta problemática que se cobra la vida de una mujer por día y exigió la urgente implementación de la ley 26.485 y de políticas públicas destinadas a prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres.
El colectivo #NiUnaMenos, en tanto, informó que 21 femicidios fueron perpetrados en abril, cuando una mujer fue asesinada cada 30 horas hasta el día 27 del mes.
“Los hombres y policías involucrados en la desaparición y el terrible femicidio de Araceli dan muestra una vez más de que las mujeres estamos en peligro, que el machismo mata y el Estado es cómplice y responsable”, advirtió Mumalá en un comunicado.
El registro hecho por Mumalá demuestra que son las organizaciones y no el Estado las que confeccionan sus propios diagnósticos. “Si lo podemos hacer nosotras sin que nadie nos financie, demuestra que basta con decisión para poder construir un mapa de la situación de la violencia que vivimos las mujeres en nuestro país. Nos permite visibilizar, es una herramienta para ir a exigir por nuestros derechos”.
El Informe compila asesinatos de 274 mujeres, 9 travestis, 15 femicidios vinculados de mujeres y 33 femicidios vinculados de hombres y niños. Según los datos relevados a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país:
- El 17% de las mujeres asesinadas habían realizado denuncias previas
- El 9% tenían medidas de protección
- 67% de los femicidios fueron cometidos por pareja o ex pareja de la víctima
- El 13% por conocido de la víctima
- El 8% por un familiar.
- 169 femicidios ocurrieron en la vivienda de la victima
- 97 en la vía pública.
- El 35% de las mujeres asesinadas convivían con el femicida
- 20% estuvieron desaparecidas
- 6% fueron violadas o abusadas
- 4% estaban embarazadas
- 3% se encontraban en situación de prostitución
Raquel Vivanco, coordinadora de Mumalá, analiza qué hay detrás de estas cifras: “Vemos que hay un recrudecimiento de la violencia que tiene que ver en parte con que las mujeres dijimos basta, nos organizamos, salimos. Y hay un recrudecimiento de la violencia también a partir de la situación económica y social que empezamos a vivir en un contexto de ajuste como el que estamos sufriendo. Somos las más pobres entre los pobres y cuando hay ajuste, recortes económicos, desempleo, vuelve a haber una violencia desatada que impacta también y principalmente en la vida de las mujeres. Al recrudecimiento producto de nuestra organización se suma la violencia producto de la crisis económica”.
El otro dato que arroja el informe de Mumalá tiene que ver justamente con la fuente donde fueron a buscar los casos: los medios. Dicen: “Hubo un viraje en cómo se empezó a abordar el tema, se empezaron a visibilizar los casos de asesinatos de mujeres como femicidios. Igual muchas veces es solo el título, pero cuando vas a la profundidad del abordaje se sigue revictimizando a las mujeres, se sigue buscando el por qué, la causa, o se hace pie en que los hombres desataron una situación de emoción violenta. Es decir, se siguen construyendo las justificaciones. Sigue quedando mucho por hacer”.
Después de la rápida reacción del movimiento de mujeres, el gobierno publicó en el Boletín Oficial la Decisión Administrativa 149/2017 por la cual se reasignan los 67 millones de pesos para el Consejo Nacional de las Mujeres y el Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres.
FOTO: Mapa de femicidios en Argentina. (Mumalá)