La irrupción del virus en el país y la región obligó a la comunidad en general a cambiar inmediatamente hábitos y costumbres para protegerse de la enfermedad. Pese a los esfuerzos y la toma de conciencia por gran parte de la población, el avance del covid se volvió incontenible y los más expuestos son los profesionales que batallan a diario desde el área de salud. “Nunca pensé vivir algo así”, manifestó un médico con casi 30 años de ejercicio en los distintos pueblos de nuestra zona.
Se trata del Dr. Eduardo Calvo, actualmente al frente del Comité de Emergencia de la localidad de Monje, quien confió que en sus casi tres décadas trabajando en el ámbito de la salud jamás imaginó estar atravesando una situación similar a la actual.
Sin embargo, en su vasta experiencia, confió que atendió casos de Gripe A en la región y si bien no llegó a nuestra zona, también se preparó junto a otros profesionales por el avance del cólera, acondicionando incluso el Hospital de Barrancas. “Todas estas cosas nos van dejando una enseñanza”, afirmó.
En ese sentido, indicó que varios de los consejos y recomendaciones se volvieron un hábito gracias a esas experiencias y que el lavado de manos, uso de alcohol en gel y de barbijo son medidas preventivas que ya deberían ser cotidianas en esta situación.
“Ver los barbijos en las sociedades occidentales parece que no fuese cierto, pero hay que usarlo y es una gran protección. Creo que el virus se va a ir yendo de a poco. Estos años va a ser para que nos inmunicemos, ya sea por la enfermedad o a través de la vacuna y teóricamente para 2022 ya estaríamos más libres”, señaló con visión esperanzadora el profesional.
“Hay que aprender sobre la marcha, es una enfermedad nueva y esperemos que no caiga muy fuerte sobre nuestras localidades, sobre nuestros vecinos. Nos conocemos todos y sentimos mucho las pérdidas cuando fallece un paciente, por eso la recomendación y el pedido de cuidado a todos”, concluyó.