Un joven oriundo de Monje y su pareja transitaron el coronavirus cumpliendo con el aislamiento en su departamento de la ciudad cuna de la bandera. Si bien permanecían tranquilos por no pertenecer a un grupo de riesgo, la incertidumbre ante el virus desconocido no estuvo al margen, pero finalmente lograron superarlo y ya fueron dados de alta.

La primera en contagiarse fue Bélen, pareja de Leandro, nacido y criado en Monje. Previo a manifestar síntomas, la joven de 24 años había estado en Perú, pero también en el aeropuerto de Santiago de Chile, por lo que no pudo precisar cuándo o cómo se contagió.

Llegó a la ciudad a mediados de marzo y una semana después, más precisamente el 24 de dicho mes, comenzó a manifestar molestias en todo el cuerpo y seguidamente levantó fiebre, de acuerdo indicó la paciente recuperada. 

Teniendo en cuenta que poseía un antecedente de viaje reciente, Belén se comunicó con el 0800 que la Provincia puso a disposición para efectuar consultas relacionadas al coronavirus y describió su situación. 

Al día siguiente, personal del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES) se hizo presente en su vivienda y le realizó un hisopado para llevar a analizar al Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario (CEMAR).

El 28 de marzo, los resultados del test confirmaron que la joven portaba el virus. Ese mismo día el vecino de 34 años oriundo de Monje comenzó a manifestar picazón en la garganta y nariz, conforme pasaron los días se sumaron síntomas como dolor en los globos oculares.

Por convivir con una paciente infectada y tener además antecedente de viaje, ya que había vacacionado en Brasil, Leandro también fue sometido a un estudio de coronavirus que unos día después también arrojó resultados positivos.

La pareja realizaron el tratamiento aislados en su departamento, con seguimiento telefónico diario y consumo de paracetamol. “Fiebre llegué a tener casi 40, pero solo dos días. Dolor de cuerpo tuve durante tres o cuatro días” comentó Belén respecto de los síntomas.

Asimismo, detalló que días después de esos primeros síntomas perdió el olfato durante casi seis días “recién ahí pude recuperar un poco del olfato, incluso hasta el día de hoy hay olores que me cuesta percibir”.

Luego del monitoreo del caso, los pacientes fueron sometidos a dos pruebas PCR, conforme al protocolo, y ambos arrojaron resultados negativos por lo que se les concedió el alta.

“De la cepa que me contagié no me puedo volver a infectar, de las otras dos que circulan en el país, sí”, detalló la joven acerca de la generación de anticuerpos, de acuerdo le indicaron los profesionales. “Nunca tuvimos seguridad de qué nos iba a pasar porque nadie lo sabía”, concluyó.

Fuente: Rosario Plus