El 29 de junio de 1986, el Estadio Azteca de México fue testigo de la segunda consagración de Argentina en la Copa Mundial. El plantel de entonces contó con la presencia de dos arqueros de la región, quienes lograron cumplir el sueño de todo futbolista y llevarle alegría a todo el pueblo argentino.

Con Bilardo como entrenador y Maradona como gran figura, la albiceleste venció a Alemania en la final y sumó una nueva copa para su vitrina. La región puede presumir de otorgarle dos arqueros a aquel plantel imbatible: Miguel Zelada de Maciel y Nery Pumpido de Monje.

“Éramos un gran conjunto, con el mejor del mundo (por Maradona)”, comentó el arquero macielense, en diálogo con IRE, rememorando aquel equipo y un campeonato que quedó grabado en la memoria de todos los argentinos.

El seleccionado de Bilardo debutó con una victoria por 3-1 ante Corea del Sur. En la segunda fecha fue empate 1-1 frente a Italia, que llegaba como campeón. Argentina cerró la fase de grupos venciendo 2-0 a Bulgaria.

Camino a la gloria, en los octavos de final, derrotaron 1-0 a Uruguay. Mientras que en cuartos llegó el histórico partido ante Inglaterra. Un encuentro lleno de magia donde Maradona marcó el primer gol con “la mano de Dios” y luego otro considerado como “el mejor tanto de la historia de los mundiales. Fue 2-1 para llegar a las semis.

Tres días después, ante Bélgica, el 10 volvió a brillar y con dos goles, Argentina se impuso 2-0 y accedió a la final. “Teníamos un maestro de orquesta”, dijo Zelada refiriendo a Diego y agregó: “El maestro de orquesta tenía grandes músicos. Éramos un gran conjunto”.

En la gran final del mundial Argentina derrotó 3 a 2 a Alemania y de esa forma, el conjunto conducido técnicamente por Bilardo sumaba su segunda Copa del Mundo. “Ser campeón del mundo es algo que no se puede describir”, compartió el macielense y enfatizó: “Hay que vivirlo”.

Cabe destacar que Miguel Zelada tuvo sus primeros pasos en los dos clubes de su pueblo (Club Maciel y Club Alba), también pasó por el club del cual es hincha: Rosario Central y se consolidó como el mejor arquero en el América de México, donde se consagró tricampeón en la misma época que levantó la copa del mundo.