Maciel recibirá por primera vez a Jorge Fandermole en el escenario del Cine Teatro Iris. El show del cantautor oriundo de Pueblo Andino y reconocido internacionalmente será esta noche. Las puertas abren a las 20.45 horas y contará con la actuación previa de Verónica Marchetti. En la previa, desde IRE mantuvimos una cálida conversación acerca de cómo se prepara, el repertorio y el impacto de la pandemia. 

El consagrado artista hará un show íntimo con lo mejor de su repertorio y en la previa dialogó con IRE y confió: “Tengo una gran expectativa e inquietud. Voy a tratar de ofrecer un repertorio donde intento que se muestren las cosas de otra época, las que fueron pasando en el medio y también las nuevas, que den una idea global de cómo es uno artísticamente”.

Asimismo, refiriéndose al escenario macielense, expresó: “Celebro que tengan un lugar así. Estaría muy bueno que todos los pueblos tuvieran espacios bien tratados y equipados. Los artistas nos ponemos contentos porque significa un lugar potencial para llegar”. 

El show será solo con su guitarra, un estilo tradicional e importante dentro de la música argentina, de acuerdo con sus palabras. “Cada formato tiene su dinámica y un modo de acercamiento diferente con el público”, señaló.

Y agregó: “El arte nos transforma a nosotros como artistas y transforma a aquellos que están escuchando, proponemos una manera de ver el mundo. Uno busca emocionarse un poco y emocionar a los demás con un poco de música, con letra y algún mensaje. Intentamos compartir un buen momento y de mucha comunicación”.

Pueblo Andino de sus “épocas más felices”

Más allá de los recobecos del camino nunca perdió su estrecha vinculación con las costas del río Carcarañá en Pueblo Andino. Así lo definió Fander: “El pueblo no se abandona nunca porque está arraigado en la parte más importante que tiene uno y que es la infancia. Para mi fue el lugar donde se constituyó la personalidad y creo que a todos le pasa lo mismo”.

Confió además que nunca dejó de merodear sus calles: “Uno se aleja del pueblo porque la vida lo va llevando, pero va regresando siempre porque esos lugares iniciales siguen siendo muy importantes en la imaginación de uno. Fue una época de las más felices de la vida, crecer a orillas del río, en un pueblo chico y al aire libre”.

Lamentablemente en los últimos meses sucedió la pérdida de su mamá, que era una de las raíces que lo sostenía. “Iba con mucha frecuencia a Andino, pero este año falleció mi madre, así que estoy yendo menos. La casa familiar fue un lugar de mucha felicidad y el río es el lugar de retorno permanente, son los lugares donde más me gusta estar”, definió.

“Las canciones sólo existen cuando se cantan”

Con clásicos populares que suenan en todas las peñas el cantautor, en un baño de humildad y quitádole el estigma del nombre propio, definió: “Las canciones existen solo cuando se cantan, sino quedan olvidadas. He tenido muy buenas sensaciones cuando he escuchado mis canciones en las voces de otros, porque las han tratado muy bien y las han mejorado, siempre ha sido un placer”.

Y entre canciones y artistas avanzó: “Me siento muy honrado por el reconocimiento, por la cercanía que he tenido con el público de diferentes lugares y la buena relación con mis compañeros músicos. Esas son las cosas que a uno lo mantienen vital y en el camino”.

Y en sintonía aclaró: “Lo que uno hace es poner un granito de arena con alguna canción que tal vez quede en la memoria de algunos durante algún tiempo, algunas desaparecerán rápidamente, otras las tomarán más adelante y las hará vivir de nuevo. Todo lo que uno hace forma parte de una gran rueda histórica dentro del cancionero, que viene dado por una infinidad de creadores de los que uno se ha nutrido. Somos un puntito de esa gran rueda de artistas que van pasando por la historia”.

pandemia

El impacto de la pandemia nos atraveso a todos y los eventos artísticos no fueron la excepción: “Estar casi dos años con la actividad muy planchada es una experiencia que hay que pasarla. Uno trata de volcar la energía hacia lugares que a uno le permitan seguir adelante, sigue conectado con otros músicos, con amigos y puertas adentro se pone a pensar en hacer las cosas diferente, poner la energía en estudiar, compartir letras y músicas con otros”.

Luego, continuó: “Los que pudimos sobrellevarlo y ahora estamos intentando arrancar de nuevo hemos sido afortunados porque hubo sectores que la pasaron realmente muy mal y sería una injusticia quejarnos, porque estamos acá y uno debe solidarizarse con aquellos que han perdido mucho. Cualquier queja es un poco gratuita en relación a quienes han perdido mucho realmente, ojalá podamos ir acomodándose de nuevo a esta nueva dinámica”.

Entre enseñanzas, el músico culminó: “La pandemia me enseñó a ser paciente, a pensar que ocurren muchas cosas que están más allá de la voluntad y energía de uno, de las intenciones y de los proyectos. Uno se da cuenta que forma parte de un sistema que tiene una dinámica que pasa muy por encima de lo que a uno se le pueda pasar por la cabeza. Hay que tratar de ser más humilde y pensar que hay otro equilibrio al que amoldarse. Probablemente sea la paciencia lo que más te enseña”.