Esta mañana los docentes públicos de la delegación de Amsafe San Lorenzo llevaron a cabo una conferencia de prensa en su delegación de la ciudad histórica. Evaluando la situación en torno al cronograma de pago del salario anunciada por el gobierno provincial, ponen en duda que el comienzo de clases se garantice el 2 de marzo. Además insistieron que se sostenga la cláusula gatillo.
En diálogo con IRE, el delegado regional de Amsafe San Lorenzo, Ricardo Fernández, sintetizó: “Se cambió el cronograma que habían anunciado horas antes diciendo que no había salido desde el Ministerio de Economía y realmente no fue así, lo informó la provincia de Santa Fe. Estábamos todos esperanzados por un comienzo de año mejor”.
La postura del gremio es contundente y rechazan el cronograma. “Los activos vamos a cobrar el 13 de enero y los pasivos el 15. Esto nos llena de preocupación, dado a que muchos vencimientos corren antes”, explicó.
La comisión directiva provincial realizó una presentación gremial ante el Ministerio de Trabajo solicitando que se modifique el cronograma de pago. “Que se acorte. En el caso de no ser posible, que se extiendan los plazos de vencimiento de los servicios de luz, agua y de todas las tarjetas que corresponden al banco de Santa Fe”, añadió el delegado.
Desde el gobierno provincial prevén que el 2 de marzo comience el ciclo lectivo 2020. En ese sentido Fernández manifestó que “si esta situación se vuelve a repetir en febrero y en marzo, es muy difícil garantizar que el 2 de marzo vayan a comenzar las clases normalmente”.
Además, se encuentra vigente la discusión paritaria para este año. “Esperemos que el gobierno provincial convoque, tal como se comprometió, para discutir con los compañeros en las bases, cuál va a ser la propuesta salarial”, dijo.
En ese sentido, agregó: “Han dicho que no van a sostener la cláusula gatillo. Nosotros vamos a insistir que es la mejor herramienta para no perder tanto poder adquisitivo con los salarios y que nos ha dado buenos resultados. Insistimos en esa forma de actualización dado a que hay una inflación previsible que va a rondar entre el 40 y 45%”.
También reclamaron que en los recibos publicados no se actualizó la antigüedad en algunos docentes y explicó que “afecta a aquellos que en en noviembre o diciembre tenían un incremento en el porcentaje a percibir en el salario por el rubro de antigüedad”. “Al no actualizarse, no ven reflejado eso lo que significa una retención salarial que no corresponde y nos preocupa”, indicó.