Tras el dictado de la conciliación obligatoria, cámaras aceiteras y empresas contratistas de obra mantuvieron este viernes la primera reunión con el gremio de la construcción para intentar destrabar el conflicto que paralizó la actividad en más de una decena de terminales portuarias, pero no llegaron a un acuerdo.
El encuentro se llevó adelante en la sede del Ministerio de Trabajo de Santa Fe y participaron representantes del empresariado y dirigentes sindicales. El secretario general de la Uocra de Rosario, Carlos Vergara, garantizó que hasta el 28 de julio inclusive, que rige la conciliación obligatoria, no efectuarán protestas ni bloqueos.
“Se comprometieron a traer una propuesta a nuestros reclamos, hasta esa fecha vamos a esperar tranquilos, después veremos qué hacemos”, dijo el sindicalista y agregó: “El paro está levantado, la propuesta nuestra ya la tienen, ahora tenemos que esperar la contraoferta que hagan en el plazo fijado por el Ministerio”.
El conflicto se inició tras el reclamo del gremio a los contratistas que brindan servicios a los puertos para que paguen el 100% de aumento por día de trabajo, sumado al 35% ya otorgado a comienzos de año más el 20% adicional. “Los valores contenidos en los acuerdos quedaron obsoletos, la inflación se comió los ajustes, por eso exigimos una actualización”, dijo el gremialista.
También reclaman un premio por lo que se considera parada de obra -plazo por el cual una construcción puede estar demorada hasta 45 días- y el mantenimiento del acuerdo agroexportador para lo que se denomina “obra nueva”.
Debido a la protesta de la Uocra hubo más de una decena de terminales portuarias santafesinas que debieron paralizar sus actividades debido a piquetes realizados por el gremio que impidieron el acceso de trabajadores a las plantas procesadoras.
El miércoles por la noche, el Gobierno de Santa Fe dictó una conciliación obligatoria y convocó a una audiencia entre las partes, que se llevó a cabo este jueves por la mañana.
Las terminales afectadas fueron las de San Lorenzo, Puerto San Martín y Timbúes.
Desde sectores de la agroindustria denunciaron que el gremio exige pagos “exorbitantes” a los contratistas que realizan tareas de mantenimientos en las plantas. Desde esas terminales aeroportuarias la Argentina exporta el 80% de sus granos y derivados industriales oleaginosos de soja.