En un contexto que se define “hora a hora” según confirmó el Secretario General del Sindicato de Petroleo, Gas y Biolcombustibles de Santa Fe Sur, Rubén Perez, ante ayer la Afip pidió la quiebra de la empresa, mientras que ayer a las 15 en el Ministerio de Trabajo confirmaron el pago de los salarios adeudados.
Ayer en el ministerio de Trabajo de Nación estuvieron presentes los interventores judiciales en Oil Combustibles, el intendente de San Lorenzo Leonardo Raimundo, el secretario general del Sindicato del Petróleo, Gas y Combustible local, el gerente de RRHH del grupo económico a cargo de la refinería, y la sindicatura del concurso judicial. Allí llego algo de tranquilidad porque se rubricó un acta que garantiza a los trabajadores el cobro de sueldos por los meses de marzo y abril.
Por otra parte, el miércoles la Afip entregó ante el juez comercial Javier Cosentino, el pedido de quiebra de la planta: “En atención al crudo escenario descripto por los interventores, frente a las dos alternativas planteadas -inicio del proceso de salvataje o declaración de quiebra sin más-; esta parte, en su carácter de integrante del comité de acreedores, que debe velar por el interés general de la masa, y ante la disyuntiva expuesta no se advierte otra opción que la quiebra directa”.
“Es una locura que un organismo público sea quien pida la quiebra de una empresa”, se quejó Perez. Al tiempo que reafirmó que entiende el trasfondo de la situación en una maniobra política de cara al 2019. Y remató sobre la poca sensibilidad de las autoridades: “En todas las reuniones que tuvimos con los ministros no demostraron ningún rasgo de humanidad por las más de 450 familias”.
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