A partir de la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos N° 27.742 se declaró la emergencia pública en materia administrativa, económica, financiera y energética. Lo que le permitió al gobierno de Javier Milei reorganizar la estructura estatal. Con la disolución del Afip y la creación del ARCA sólo restaban días para que avance el plan general. El foco ahora está puesto en la oficina del organismo que funciona en Galvez, que de acuerdo indica el decreto cerraría sus puertas, al igual que otras 37 dependencias. Sin un comunicado oficial, los trabajadores aguardan en incertidumbre.

Esto partió de la “declaración de emergencia pública sustentada en la gravedad institucional de la situación planteada e impone la obligación de adoptar acciones urgentes, evitando que se continúen utilizando recursos públicos en perjuicio de las arcas del Estado y, especialmente, de los contribuyentes” para lo cual el objetivo mayor es “reducir el sobredimensionamiento de la estructura estatal con el fin de disminuir el déficit, transparentar el gasto y equilibrar las cuentas públicas y asegurar el efectivo control interno de la administración pública nacional a fin de garantizar la transparencia en la administración de las finanzas públicas”.

Por tal motivo, a partir del 24 de octubre de 2024 se disolvió la Afip, y se creó la Agencia de Recaudación y Control Aduanero Arca. El 6 de enero de este año por Decreto 13 se redujo la estructura de Arca al nivel de Subdirección General “y se instruyó a su Director Ejecutivo a efectuar adecuaciones y aprobar la estructura organizativa de segundo nivel operativo inferior” aclarando que “a lo largo de los últimos años se ha sobredimensionado la estructura organizacional de la entonces Dirección General Impositiva DGI”.

Este preámbulo no hace más que establecer que la delegación Gálvez, de la ex Afip, y actual Arca, junto con 38 distritos en total, cierran sus puertas para una reestructuración que tendrá un tiempo de ejecutarse, estimado en 45 días desde la publicación de la Resolución 36, que se dio a conocer en el Boletín Oficial el 5 de marzo pasado, por lo que la fecha tope de reacomodamiento será el 20 de abril.

Según el reordenamiento, los usuarios de la oficina galvense, quedarán bajo la órbita de la de Santa Fe de la Vera Cruz, y además allí deberán atenderse en los pocos casos donde los trámites siguen siendo presenciales, los que se atendían en las delegaciones de los departamentos La Capital, Garay, Las Colonias, San Justo, San Martin, y San Jerónimo.

La pregunta clave es ¿Qué pasará con los trabajadores? Y se perciben sólo dos caminos: Que sean trasladados a agencias que continúan existiendo –ejemplo, Santa Fe o Rafaela- o que queden cesantes. El gremio que los nuclea solicitó explicaciones a Nación pero no hay nada oficial sobre el destino de los empleados, al menos hasta el momento. Una tercera opción que se diluye hora tras hora sería que la oficina continúe funcionando.

En Gálvez hay 4 empleados, la oficina estará abierta al menos hasta que venza el plazo de la reestructuración y podría haber reuniones en estas horas con referentes del gremio que los nuclea para intentar que los trabajadores conozcan con precisión qué pasará con su futuro laboral.