La segunda prueba para la Selección en este Mundial U17 Femenino que se disputa en Debrecen (Hungría) fue Australia, 2 del ranking FIBA y una potencia mundial. Una camada que fue campeona del Asiabasket U16 del año pasado, y tanto su historia, como su desarrollo y sus logros deportivos son algo ya conocido. Argentina necesitaba cambiar la cara después de la derrota de ayer, y si bien terminó siendo derrota por 66-44, sin dudas que el juego que desplegaron las albicelestes deja muy buenas sensaciones, por jugarle de igual a igual a un rival de mencionada calidad. El martes, en la última fecha del Grupo B del torneo, la Selección cerrará la primera fase midiéndose ante Eslovenia.
El equipo dirigido por Lali González mejoró su despliegue respecto al que tuvo en el debut. Cubrió mejor los espacios y, si bien la intensidad por momentos le dio vértigo, a través de su dinámica pudo encontrar puntos para arrojar buenas sensaciones. El nivel de Paula López (12 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias) fue clave para dar orden y efectividad, como parte de un equipo que también encontró buenos pasajes en la calidad de Angelina Giacone (10 unidades más 3 recuperos), la lucha debajo del cesto de Nerea Lagowski (8 puntos y 9 rebotes) y la intensidad de Male Maggi (7 tantos), además de los intangiles de Alma Bourgarel, Dagmar Hentschel y Victoria Fontana.
Como parte de un interesante inicio, Argentina se fue abajo por poco margen (19-12) ya demostrando una mayor concentración, con un buen trabajo defensivo y peleando cada balón, lo que llevó a Australia al fallo. Sostuvo ese mismo rendimiento durante el segundo parcial con alguna pequeña laguna en ataque (31-21 al descanso largo), teniendo uno de sus mejores pasajes en un tercer episodio en el cual encontró una racha de puntos que la situaron por un momento abajo por apenas ocho (38-30), pero las oceánicas lo cerraron mejor y en el último capítulo hallaron la efectividad necesaria para escaparse. De todas formas, independientemente del resultado, la Selección hizo una gran media hora de juego y compitió, demostrando estar a la altura de las exigencias.
Los números también dirán que Argentina padeció la talla de las australianas en la lucha rebotera (60 a 43), pero que ese registro no afectó el rendimiento de un equipo con mucha vocación. Las de Lali no solamente bajaron sus pérdidas respecto al partido contra Francia (pasaron de 34 a tener hoy apenas 17, la mitad), sino que además en el balance tomaron buenas decisiones de ataque y siempre incomodaron al rival desde el juego físico (Australia tuvo 23 pérdidas y un 33% de cancha, sosteniéndose gran parte del juego a través de los libres).
Mañana lunes será jornada de descanso en el torneo, retomando la acción el día martes cuando la Selección se enfrente a Eslovenia en la tercera fecha de su zona. La acción arrancará a las 7:30 horas de nuestro país, en un partido que servirá para conocer la colocación final dentro del grupo y así saber el oponente que tocará en el cruce de octavos de final (miércoles). Por lo pronto, hoy Argentina dejó una muy buena imagen frente a una potencia, ratificó sus condiciones y mantiene su curva evolutiva en el desarrollo.