Ayer jugaron por la Copa Santa Fe, con más de mil hinchas en la cancha del Parque de Irigoyen, los dos mejores equipos de la Liga Galvense, Santa Paula de Gálvez, frente a Unión de B de Irigoyen, el partido le dio la victoria para Unión por 3 a 2. Al minuto 43 del segundo tiempo, el árbitro del partido Pablo López, decidió suspenderlo, al denunciar una agresión por parte del jugador número 16 de Santa Paula.

“A los 43 minutos del segundo tiempo del partido, luego del tercer gol de Unión, entre todo el tumulto, varios jugadores de Santa Paula vinieron a protestar por el penal cobrado anteriormente, que le dió el empate del segundo gol a Unión de B. de Irigoyen. El agresor fue el jugador 16. Ya hice la denuncia policial correspondiente”, dijo el árbitro del encuentro, Pablo López.

Una vez que el árbirto es agredido, tiene la potestad de suspender automáticamente el partido. López detalló: “Dentro del campo de juego, jamás percibí que podría suceder algo así. El penal, que para mí fue un penal claro, desató la furia de algunos jugadores de Santa Paula”.

“Desde mi parte, trabajo como árbitro porque me gusta. En el año 2008 me retiré después de ser brutalmente agredido por jugadores de Central de San Javier. Luego conseguí trabajo fuera de mi casa, esto me obligó a dejar a mi familia sola, y luego fui operado de la mano”, relató su historia el ärbitro agredido.

“Hace dos años que retomé el arbitraje, por cuestiones económicas, trabajé seis años afuera. Comencé dirigiendo reserva, luego primera de la Liga Sanlorencina, Primera de Liga Galvense, Copa Federación y Copa Santa Fe”, resumió su trayectoria, López.

“Me estaban yendo las cosas bien, y con esto que me pasó ahora, nos plantearemos con mi familia si continúo en el arbitraje. Por suerte hace un mes que conseguí un trabajo bien remunerado en Cliba, Una vez que quede efectivo en mi trabajo, tiro todo”, sentenció López, tras ser agredido por jugadores el domingo.

“El jugador número 7 de Santa Paula me abrazó y separó a sus compañeros, eso debo rescatarlo. Los dirigentes también se solidarizaron conmigo”, dijo López y colminó: “Hay cosas que no se explican, la agresión no se explica. Mi tutor me marcó mis errores, pero en los casos puntuales, en los penales, mis fallos estuvieron bien”.