Este miércoles por la tarde, una mujer se presentó a visitar a un interno en la cárcel de Coronda, pero al pasar por los controles de ingreso los oficiales sospecharon que llevaba algo extraño en sus zapatos. Inmediatamente comenzaron una requisa con resultado positivo.
La sorpresa fue que encontraron envoltorios entre los huecos de su calzado y que presumiblemente se trataba de material estupefaciente. Convocaron al personal de la Policía de Investigaciones, quienes en presencia de dos testigos, realizaron las pesquisas de narcotest sobre dos envoltorios donde estaban las sustancias y quedó demostrado que se trataba de 32 gramos de cocaína y 58 gramos de marihuana.
Con el resultado, la mujer quedó aprehendida y a disposición del fiscal en turno de Coronda del Ministerio Público de la Acusación.
Controles con escáner
El domingo pasado, un agente penitenciario intentó evadir los controles e ingresar a la cárcel de Coronda con casi un kilo de droga, entre cocaína y marihuana. Los escáner de control detectaron los elementos sospechosos y al requisarlo le encontraron en los bolsillos el material estupefaciente.
El personal detectó que uno de los agentes llevaba objetos sospechosos en ambos bolsillos del pantalón. Al requisarlo, le secuestraron medio kilo de cocaína y 388 gramos de marihuana. “No vamos a permitir que se ensucie la tarea y el uniforme de los penitenciarios y vamos a proceder con la mayor dureza”, enfatizó la secretaria provincial de Asuntos Penales, Lucía Masneri.
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