Vicentín, una de las principales empresas del sector aceitero en el Gran Rosario, presentó un plan de pago para saldar los salarios atrasados de sus trabajadores, lo que permitió que los gremios aceiteros levantaran las medidas de fuerza. Las actividades fabriles y portuarias, que estaban paradas desde la semana pasada debido a la protesta, se reanudarán hoy con el regreso a los turnos habituales. Sin embargo, la situación de la empresa sigue siendo crítica, y la incertidumbre sobre su futuro inmediato persiste debido a su crisis de liquidez y la falta de nuevos contratos.

La propuesta presentada por Vicentín consistió en un plan de pagos en cuotas para los salarios adeudados. Según el comunicado de la empresa, este jueves se acreditará un 25% adicional del salario neto del mes pasado, lo que se suma al 50% que ya se había pagado anteriormente. El miércoles 26 de marzo se completará el pago con el depósito del 25% restante. Además, la empresa se comprometió a realizar los pagos correspondientes a las cuotas de alimentos de febrero este miércoles.

 La empresa atraviesa una grave crisis de liquidez debido a la falta de contratos de trabajo, luego de que se terminaran los fasones pactados a fines de febrero. Esta crisis de ingresos está afectando su capacidad para operar de manera normal, ya que no logró asegurar nuevos contratos para industrializar ni embarcar mercadería de terceros.

 Sin embargo, todavía no se había alcanzado una resolución sobre la situación de la planta de Avellaneda, que está bajo la órbita de la Federación de Aceiteros. La falta de certezas sobre la continuidad de la actividad en esa planta genera más incertidumbre dentro de la empresa y entre sus trabajadores.