Por primera vez en el Cordón Industrial se realiza un sistema de control de alcoholemia y narcolemia para los trabajadores, en el marco de un plan de prevención de adicciones. Se trata del sistema implementado por el área de Salud Ocupacional de la Cooperativa de Trabajos Portuarios de Puerto General San Martín, por el cual en el ingreso de los operarios a su lugar de trabajo, podrán ser requeridos para la realización de controles de alcoholemia y narcolemia.
Los exámenes se realizarán de manera periódica y anónima y, en caso de dar positivo, el obrero vuelve a su casa, impidiendo que ingrese a trabajar durante esa jornada.
Javier Dossena, médico responsable del área mencionada, explicó como se trabajará en la medida propuesta: “La medida busca preservar la salud del trabajador, impidiendo que desarrolle sus tareas cuando no está en condiciones óptimas para hacerlo”.
El médico señaló, que los controles se realizan de manera periódica y aleatoria. “No se trata de una persecución al trabajador, sino por el contrario, de prevención. El trabajador que diera positivo en alguno de los controles tendrá aquí un espacio de contención y, de ser necesario, de apoyo por parte de todo el equipo médico de la Cooperativa”.
El medico aclaró que cuentan con la aprobación de los mismos trabajadores y la del sindicato y que esto será desarrollado en el Marco de un programa de prevención de adicciones de la Cooperativa, orientado a evitar el uso de drogas y alcohol.
Respecto al modo de implementación de la campaña, Dossena destacó que los entre 400 y 500 operarios de la cooperativa de estibadores se desempeñan como prestadores de servicios en diversas empresas, por lo que la cooperativa implementó en cada una de ellas un área destinada a la atención de los operarios con la presencia personal médico y paramédico para poder efectuar estos controles.
Con eso datos se trabaja sobre la prevención y se guarda la confidencialidad en temas de dependencia como tabaco, alcohol, ansiolíticos o cualquier tipo de drogas sintéticas.