El tribunal de San Lorenzo sentenció a once años de prisión a Pablo N. por haber perpetrado dos abusos sexuales hacia menores aprovechando la situación de convivencia por estar vinculado con su mamá, situación que tuvo lugar entre el 2021 y el 2022 en la ciudad histórica. Además, fue detenido circulando en una moto robada, la cual adquirió sabiendo del dudoso origen. El fiscal Aquiles Balbis había requerido 14 años.

Ayer, en los Tribunales Provinciales de San Lorenzo, los Jueces de Primera Instancia Ariel Cattaneo, Marisol Usandizaga y Griselda Strologo condenaron a Pablo N. a la pena de 11 años de prisión efectiva por los delitos de abuso sexual simple y abuso sexual con acceso carnal agravado por ser la víctima menor de 18 años y por la relación de convivencia y encubrimiento, todo en concurso real y en carácter de autor.

El Fiscal Aquiles Balbis de la Unidad Fiscal San Lorenzo le atribuyó haber abusado sexualmente de una niña en retiradas oportunidades desde el verano del 2021 hasta agosto de 2022, en un domicilio de barrio Capitán Bermúdez de San Lorenzo, donde convivía con su pareja y la hija de ella. Encuadrando los hechos dentro de las calificaciones de abuso sexual simple y abuso sexual con acceso carnal. Tiempo después, cometió otro hecho en otro domicilio de la ciudad.

Además, se lo acusó de haber abusado sexualmente de otra víctima menor de edad con la cual también convivía, en reiteradas oportunidades. Para cometer los hechos, el imputado se aprovechaba de la situación de convivencia preexistente con las víctimas. El fiscal requirió 14 años de prisión. 

En la investigación penal preparatoria se le atribuyó también que en fecha 23 de abril del 2021, y mientras se desplazaba en una bicicleta playera negra, abordó a una de las víctimas en inmediaciones de calle Entre Ríos y Sargento Cabral y le la tocó por encima de la ropa.

Pero no fueron los únicos ilícitos que se endilgaron, sino que previo al 6 de enero del 2022, el hombre compró una motocicleta marca Honda Modelo Wave 110, sin dominio visible sabiendo que la misma provenía de un hecho ilícito. La situación fue constatada en esa primera semana de enero por personal de la Policía Motorizada cuando circulaba a bordo del moto vehículo.