La biblioteca popular Pablo Pizzurno de Carrizales sigue creciendo. Luego de instalarse en su nueva sede, está más cerca de comenzar a construir su segunda etapa. Esta semana firmaron un convenio dentro del Plan Incluir, con el ministerio de Desarrollo Social, para comprar las aberturas. Recibirán 1.200.000 pesos.
En diálogo con IRE, Rogelio Bella, el presidente de la institución confió: “Con buenas noticias, estoy muy feliz. Tuvimos la grata culminación de algo que veníamos trabajando a través de la comuna de Carrizales, inclusive se inició previo a que asuman la gestión y veníamos peleando la posibilidad del Plan Incluir con la provincia y se firmaron un millón de pesos destinados a la compra de las aberturas de la segunda parte del edificio de la biblioteca”.
Y en ese sentido, avanzó: “Estamos contentos porque que el Estado reconoce, de alguna manera, cuando las instituciones trabajan bien, cuando hacen bien su trabajo y se preocupan por mantener el orden, tanto jurídico como institucional”. Y sin dudas fue un trabajo en equipo de muchos vecinos comprometidos: “Hace 20 años que un grupo de gente viene trabajando y manteniéndola en orden, hubo mudanzas, se logró comprar el terreno para realizar la primera parte del edificio, que es donde hoy estamos y nos sentimos profundamente orgullosos, es un lugar nuevo y lindo”.
Pero, las ganas de crecer están instactas: “Ahora vamos por la segunda parte, tenemos una política de una biblioteca abierta, que no sea un depósito de libros, sino de que pasen cosas. De que los jóvenes, los niños y los alumnos de nuestra localidad tengan un espacio para el acceso a la cultura. Hay gente que no tiene posibilidad de salir del pueblo, la biblioteca quiere construir un salón de usos múltiples en el que se pueda pensar una obra de teatro, una pantalla de cine y pensar en la ampliación de recursos culturales”.
Todo es parte de un concepto de trabajo que desde el grupo humano se esfuerzan por cumplir, reconoció Bella: “La cultura es un derecho para todos y queremos hacerlo en la biblioteca, para eso necesitamos agrandarnos y eso es lo que buscamos, el Plan Incluir nos deja un paso más cerca. No es fácil, se gasta mucho dinero y es mucho esfuerzo, vamos ahorrando peso por peso. La comisión nacional de bibliotecas populares colabora todos los años con subsidios y demás. Tenemos muchos materiales que fuimos guardando y ahora solo queda comenzar con la obra. Queremos que sigan colaborando con nosotros”.
Entre los actores, hay algunos claves, y así lo detalló el presidente de la comisión directiva: “Quiero nombrar a Rocío Bicoca, la secreteria de la biblioteca, que si no fuera por ella probablemente esto no hubiera llegado a la firma, por su empeño, por su trabajo, por seguir a los funcionarios para lograr que este proyecto se consiga. Nuestra idea es que la biblioteca sea un espacio abierto, todo lo que podemos aplicar, lo hacemos. Es para la comunidad, los invito a sumarse siempre, haciendo y proponiendo lo que se les ocurra. Queremos que la biblioteca sea un lugar vivo”.
Feliz por la buena nueva, el empresario local de la única fábrica de asiestos de bicicleta del país, cerró: “Estamos por arrancar, se empezará el movimiento de obras que soñó mucha gente y que trabajó tanto por conseguirlo. Mucho orgullo, trabajo y sacrificio, pero con muchas ganas”.