Una familia de Barrancas, decidió disfrutar del sábado al aire libre en las costas del río Coronda en el paraje de Puerto Aragón. Poco después de llegar, por el intenso calor Ivan fue a mojarse los pies, pero apenas ingresó al agua sintió un fuerte pinchazo. Pensó que había pisado algo, pero el dolor siguió avanzando y confirmaron que se trató de una picadura de raya. Inmediatamente se trasladó al Samco del pueblo. 
 
De acuerdo relata la página de Puerto Aragón, Iván decidió refrescarse en la orilla del río frente a la playa del Cherú Guazú, cuando sintió un fuerte dolor en su pié: “La pasé muy mal porque en ese momento uno no sabe qué hacer. Tuve que manejar hasta el hospital porque no podía esperar que venga una ambulancia”.
 
Y remarcaron lo significativo de sumar atención médica: “Sería muy importante que la sala de primeros auxilios esté abierta en temporada por si pasan cosas como éstas o algún otro accidente”.
 
Al tiempo que confiaron que por suerte la chuza no llegó a atravesar su pie por qué el tobillo se lo impidió. Pero el dolor fué muy intenso, el muchacho se sinceró: “No se lo deseo a nadie”.
 
Es temporada estival, las rayas buscan playadas para parir sus crías y dónde hay arena, hay peligro. La picadura de una raya puede ser fatal, según dónde clave su aguijón. Además del dolor físico que produce, suelta una toxina venenos
 
Entonces, ¿Qué hacer en caso de picadura de raya?
El dolor es inmediato e intenso, si bien disminuye gradualmente en un periodo de 6 a 48 horas. Muchas personas que sufren este tipo de herida manifiestan desvanecimiento, debilidad, náuseas y ansiedad. Son menos frecuentes los vómitos, diarrea, sudoración, espasmos generalizados y las dificultades respiratorias.
 
Una vez lavada la herida se recomienda sumergir la extremidad en agua caliente, todo lo calie nte que el paciente pueda soportar (40-45º C) durante unos 30 a 90 minutos. Con esta medida se intenta desactivar el veneno que posee una toxina termolábil, consiguiendo reducir el dolor. No es necesario aplicar torniquete. Acudir al centro de salud más cercano.