Más de un centenar de vecinos volvieron a congregarse en Barrancas luego del abuso sexual a Selene el jueves por la noche. Luego de la manifestación del sábado, este martes pasadas las 19 autoridades locales y provinciales enfrentaron las consultas de los vecinos. Concretaron una reunión para el martes en el Ministerio de Seguridad con Maximiliano Pullaro, asumió una nueva jefa en la comisaría, y prometieron trabajar para cambiar los operativos y generar mayor seguridad.
Al frente estaba el Jefe y subjefe de la Unidad Regional XV, un secretario del Ministerio de Seguridad, la diputada provincial Tejeda, el jefe de la comuna y parte de su gabinete. Todos parados en los escalones de la entrada comunal, que hacía las veces de tarima para observar a los vecinos presentes. Al lado y con una pancarta que rezaba: “De camino a casa quiero ser libre no valiente”, Selene Camuglia, la víctima de la violación.
En semicírculo los vecinos fueron apuntando sus preocupaciones, por momentos más tensos que otros. “Quiero que me garanticen que cuando salga no me va a matar”, confesó la chica todavía con las marcas del terrible suceso en su rostro. Y se quejó: “Me dijeron que la madre del pibe golpeó a su hija porque me defendió, quién me asegura que no me va a hacer nada a mí”.
Cada tanto algún concepto predominaba y el clima se ponía de aplausos o susurros que pedían “Con esto no hagan política”. El clima social demandaba una respuesta que llegó de la mano de un secretario del Ministerio de Seguridad. “Pullaro confirmó que el martes los atiende, pongan ustedes la hora”, sintetizó.
Los vecinos acordaron que deberán concurrir en un grupo reducido pero que necesitan que la máxima autoridad provincial los escuche y les brinde respuestas. Así es como de a poco se fueron desconcentrando. No quedó una próxima fecha establecida de debate popular. Pero si una nueva jefa en la Comisaría, y la promesa de que varios operativos van a mejorar.
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